Amistoso

La cara B salva la honra (1-2)

  • El Betis pierde por la mínima ante la Fiorentina tras reaccionar con los cambios. Rubén Castro lideró a los verdiblancos, que mejoraron con tres medios.

El Betis de Julio Velázquez necesita mejorar, como si de un escolar se tratase. La insuficiente reacción tras el descanso, cuando el técnico parapetó al equipo con tres centrocampistas puros, sirvió para maquillar el resultado y también para ofrecer unas mejores sensaciones. Bajo la batuta de Rubén Castro, elegido mejor jugador del encuentro, los verdiblancos rozaron el empate ante una Fiorentina que casi se había paseado en el primer tiempo y que aprovechó para rodar a jugadores como Cuadrado, uno de los nombres del verano por el interés del Barcelona en su contratación y que exhibió su potencia pese a estar estrenándose en esta pretemporada.

La puesta en escena del Betis simplemente no existió. Sin capacidad para llevar el peso del partido o darle tres toques con rapidez a la pelota, únicamente cuando Rubén Castro, harto de mirar el juego, se retrasaba unos metros, los verdiblancos parecieron generar algo de fútbol. Precisamente, el único disparo a puerta de los béticos en los primeros 45 minutos partió de las botas del canario, que colocó un balón a la espalda de los centrales para que Jorge Molina tirase a las manos del meta rumano. Esa acción ocurrió a los nueve minutos y a partir de ahí todo fue un monólogo de la Fiorentina, al mando de un Joaquín que tiró de repertorio lo justo para desequilibrar el encuentro.

El primer gol visitante, pese a todo, lo generó Piccini, un joven lateral que se atrevió a internarse en el área y su centro al segundo palo lo remató Vargas a placer, ante la inexistente defensa bética. Diez minutos después, una asistencia en profundidad de Joaquín dejó a Babacar, que le ganó la espalda a Jordi, ante Adán, al que superó con un tiro por bajo. La Fiorentina se colocaba 0-2 y el Villamarín comenzó a silbar a su equipo.

Si Jordi o Perquis, éste desubicado en su posición de pivote, ya los escucharon cada vez que tocaban la pelota, la grada mostró su disconformidad con un equipo plano, sin fútbol y a merced de una Fiorentina que apenas tuvo que cambiar el ritmo para marcharse con ventaja. El 4-4-2 con el que Velázquez comenzó el encuentro se sintió inferior al equipo dirigido por Vincenzo Montella, que se marchó al descanso con el mismo resultado que sus titulares habían cosechado el día antes con el Málaga.

Seis cambios de jugadores y, sobre todo, uno de sistema provocaron la reacción de los verdiblancos. La presencia de un 4-3-3, con Xavi Torres, Matilla y Nono por dentro, otorgaron mayor presencia a los de Velázquez, que también comenzaron a presionar en campo contrario. Si en el primer minuto de la reanudación Rubén Castro ya rozó el gol con un disparo cruzado, cinco después, el propio delantero canario realizó una acción individual que finalizó con una dejada a la frontal del área. Allí apareció Matilla para conectar un fuerte disparo que sorprendió al meta visitante. El Villamarín, ahora sí, arropó a los suyos, que se desplegaban de una manera mucho más ordenada, lo que permitía tanto manejar el juego como defender con más intensidad.

Chuli, quizá algo egoísta al tener a Rennella y Rubén Castro en mejor posición, tuvo el empate, pero su disparo con la zurda se marchó junto al poste izquierdo. Montella, al que ya no le gustaba tanto lo que veía sobre el campo, sacó al campo a Cuadrado, Pizarro y Mario Gómez, tres jugadores de primer nivel que volvieron a desnivelar la contienda a favor de los italianos.

Pero este Betis también supo sufrir e incluso no le perdió la cara al partido para intentar el empate hasta casi el final, con remates de Rennella, Matilla o Xavi Torres, aunque ya el marcador no se movería y el triunfo correspondería a la Fiorentina.

La cara B, esa que Velázquez había colocado tras el descanso, salvó la honra e incluso provocó que el bético se marchase a su casa con un regusto más dulce que amargo pese a la derrota. Nadie puede esconder que este Betis necesita refuerzos y no sólo el de Álvaro Cejudo, que desde el palco siguió el encuentro. La falta de fútbol del primer tiempo debe encender las alarmas en los despachos para que el entrenador salmantino pueda contar con más alternativas el 24 de agosto o a este Betis se le puede hacer muy larga la temporada. Aún se está a tiempo de corregir errores, pero, ahora mismo, no todos corresponden a lo que sucede en el césped.

 

Ficha técnica: 

1 - Real Betis: Adán; Molinero, Bruno, Jordi, Álex Martínez; Cedrick, Xavi Torres, Perquis, Pacheco; Rubén y Jorge Molina. También jugaron Dani (ps), Chuli, Nono, Rennella, Casado, Matilla y Sergio Rodríguez. 

2 - AC Fiorentina: Tatarusanu; Piccini, Tomovic, Hegazi, Manuel Pasqual; Vargas, Matías Vecino, Brillante; Joaquín, Wolski; y El Hadji Babacar. También jugaron Iakovenko, David Pizarro, Juan Cuadrado, Andrea Lazzari, Mario Gómez, Gianluca Mancini y Facunhdo Roncaglia. 

Goles: 0-1, M.27: Vargas. 0-2, M.38: El Hadji Babacar. 1-2, M.51: Matilla. 

Árbitro: Juan Manuel López Amaya (Colegio Andaluz). Amonestó al local Rennella (m.84) y a los visitantes Tomovic (m.84) y Cuadrado (m.90). 

Incidencias: Partido disputado amistoso disputado en el estadio Benito Villamarín ante unos 15.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. Antes del encuentro el Betis rindió un homenaje al lateral malagueño Ignacio Pérez 'Nacho', quien estuvo cinco años en el equipo verdiblanco y que se desvinculó de la entidad el pasado julio.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios