No es habitual que Paco Chaparro dude con las alineaciones durante la semana, pero las lesiones, incógnitas y sanciones le han obligado a ello en las dos últimas jornadas. Y ante el Madrid esto se ha acentuado de tal manera, que el trianero no deja claro en los entrenamientos el once que dispondrá el sábado en el Santiago Bernabéu.

Para empezar, las bajas de Juanito y Lima obligan a buscar un nuevo acompañante a Melli en el centro de la defensa. Y según lo visto en los dos últimos entrenamientos, Chaparro duda entre colocar al argentino Monzón, como ya ocurriera en la segunda parte ante el Barcelona, o al recuperado Arzu, que volvería a retrasar su posición el campo. Si el técnico se decidiera por esta última opción, Juande mantendría su lugar en el once junto a Mehmet Aurelio y Emana. Si finalmente fuera Monzón el elegido, Arzu pasaría al mediocampo, quedándose Juande fuera del once pese a su buen partido de la semana pasada.

Las dudas en el once no sólo vienen propiciadas por las dudas en el puesto de central. Sergio García apareció ayer en la ciudad deportiva con una faringoamigdalitis que obligó a que el jefe de los servicios médicos, Tomás Calero, le enviara a casa con un fuerte tratamiento. Esto provoca que la presencia del delantero catalán sea dudosa hasta última hora y habrá que estar pendiente de la evolución en las próximas horas. Si Sergio García no mejorase como espera el cuerpo médico, Damià sería el encargado de cubrir la banda derecha, una vez que regresa después de su sanción.

Pero las novedades en la semana verdiblanca no sólo remiten a la ocultación del once que jugará ante el Madrid. Chaparro ha vuelto a insistir en conceptos empleados ante el Sevilla y el Barcelona, como la presión, el ajuste de líneas o la salida con velocidad al contragolpe, pero con matices diferentes. Si el mayor poderío de los dos últimos rivales béticos residía en el desborde por las bandas, con jugadores como Daniel Alves, Messi, Iniesta, Jesús Navas o Diego Capel, el equipo de Juande Ramos tiene otras virtudes en su juego combinativo.

"El Madrid, como gana, terminará jugando muy bien, seguro. No tiene el tipo de extremos del Barcelona, exceptuando al holandés Robben, pero sí que tienen mucho pase interior, que les hace ganar los partidos en un abrir y cerrar de ojos. Además cuenta con Lass Diarra, que es el mejor sustituto posible de Makelele, pero con mejor manejo de balón. Él con Gago hacen una labor muy buena", señaló Chaparro en Radio Sevilla, donde también aseguró que será difícil que alguno de los entrenadores pueda sorprender al contrario, por aquello del año compartido en el Betis: "Nos llevamos muy bien y compartimos un año muy bueno, excepto lo ocurrido con la fiesta de Halloween. Juande supo salir de aquella situación y se fue muy bien con todo el mundo. Si llegamos a tener un delantero en ese momento nos metemos cuartos en la Liga. Vino Ikpeba, pero en realidad llegó tres o cuatro años después de cuando debía".

"Cuando veo que no hay opción de jugar de una forma, porque no están algunos jugadores, pues intento hacerlo de otra. Cuando recuperemos a todos ya trataremos de hacer otra cosa, porque jugar bien es defender y atacar", afirmó Chaparro, al que hasta ahora le ha funcionado el cambio de estilo. El Bernabéu marcará si la vuelta de tuerca en su libreto sigue siendo positiva.