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Un líder que no olvida la gratitud

  • Negredo recuerda a sus compañeros tras recoger el Trofeo Zarra · "Este premio es de todo el equipo", dice desde Madrid.

El oropel de la capital de España, con los brillos madridistas de Di Stéfano, Mourinho o Cristiano Ronaldo acaparando focos, no ciega a Negredo. El internacional sevillista, que mañana debe incorporarse a la concentración de la selección absoluta para preparar los dos próximos partidos oficiales ante República Checa y Escocia, tuvo ayer un ajetreado y emotivo día en su ciudad natal, donde recogió el Trofeo Zarra que otorga el rotativo Marca. Negredo fue uno de los protagonistas de la gala de los Premios Marca. Cristiano Ronaldo recogió el Trofeo Pichichi, Messi no pudo asistir para recoger el Trofeo Di Stéfano, Mourinho le dio relevo a Guardiola como Premio Miguel Muñoz y el sevillista se llevó el dedicado al máximo goleador nacional de la Liga, que lleva el nombre del recordado cabeceador vizcaíno, Zarra. Y lo primero que hizo fue dedicárselo a sus compañeros. "He venido a recogerlo yo, pero este premio es de todo el equipo. El equipo es el que me ha ayudado a venir aquí y conseguir esto", dijo rotundo.

"Estoy muy contento. Este premio lo han conseguido gente como Villa o Fernando Llorente y es un verdadero honor poder recogerlo y estar aquí", dijo en un plano más particular antes de un análisis pormenorizado de muchos aspectos.

El vallecano está muy a gusto en el Sevilla, con el que espera poder renovar su contrato en breve, tal y como quedaron el club y sus agentes en las últimas conversaciones al respecto, aunque desde Madrid no dejan de picarlo. Ayer, por ejemplo, le preguntaron si quería aprovechar este indudable éxito para enviarle algún mensaje a Mourinho, ya que el portugués decidió no contar con él cuando desembarcó en el Real Madrid, lo que posibilitó su llegada a Nervión. "A Mourinho no tengo que decirle nada. Le saludaré, pero nada más. Estoy muy contento en el Sevilla. Ojalá que pueda marcar más de 20 goles y supere mi marca del año pasado", dijo en referencia a la cifra de la pasada Liga.

El ariete tocó también la inmediata actualidad del Sevilla y se congratuló, como otros miembros de la plantilla, de la evidente solidez defensiva que Marcelino ha logrado darle: "El equipo ha mejorado mucho defensivamente, que es lo que se nos pedía. Ahora tenemos que recuperar la efectividad que siempre hemos tenido arriba. Si compaginamos las dos cosas, seguro que vamos a ir a mejor y vamos a dar que hablar".

Esta realidad le instó a apostar fuerte por el tercer puesto. ¿Pensar que el Sevilla, sin Europa, es el máximo favorito para el tercer puesto es una locura? "No, para nada, tenemos menos partidos que el resto de equipos que en teoría van a estar ahí peleando y eso tiene que ser una ventaja para nosotros, porque estaremos más frescos, y hay que hacer las cosas bien, ir partido a partido y pensar siempre en esos puestos de Champions, mejor tercero que cuarto. La temporada es larga y veremos qué pasa", dijo.

También se congratuló del "buen arranque del campeonato" e incluso valoró positivamente el punto cosechado el domingo, donde la sobrecarga de isquiotibiales le impidió tener más protagonismo. "No estaba ni para media hora, salí un rato y lo intenté, pero no pudo ser. El punto es positivo, porque fue en casa de un equipo fuerte, un Atlético de Madrid que además llegaba herido del Camp Nou, y es un rival directo. Tenía un poco de líquido en la zona, pero ya está bien y la última ecografía ha desvelado que poco a poco ese líquido ha desaparecido", dijo para tranquilizar sobre su lesión.

Negredo tampoco se inquieta por llevar sin marcar cuatro partidos, los mismos que suma sin encajar el Sevilla: "El equipo está bien, no ha perdido, y al final de temporada estos puntos nos vendrán bien. Dejar la portería a cero cuatro partidos seguidos es importante".

Por último, denunció con rotundidad desde Madrid los tristes cánticos que se escuchan en el Vicente Calderón con Puerta como hiriente motivo: "Lamentable, reprochable... Meterse con una persona fallecida que se ha quedado en un campo de fútbol es lo peor, es un insulto, y deberían pensarse si ir al fútbol o ir a pelearse por ahí, que es lo único que saben hacer".

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