La temida amenaza de la Copa de África va cobrando forma. Ayer se dieron a conocer públicamente las listas definitivas para el torneo por parte de los seleccionadores de Malí y Costa de Marfil y el Sevilla ya sabe que tendrá que ceder a tres de sus jugadores que juegan en estos equipos. Nada nuevo. Incluso se confirmó lo que se esperaba, que Kone será el único futbolista africano que no tendrá que perderse el mes de enero íntegro, dado que Vahid Halilhodzic, técnico de los marfileños, lo desestimó ante la enorme competencia que tiene el sevillista en los puestos de ataque.

Kanoute, por Malí, y Zokora y Romaric, por Costa de Marfil, marcharán a sus respectivas concentraciones justo después del día de Navidad. La Copa de África comienza el 10 de enero, pero la reglamentación de la FIFA habilita a las selecciones a citar a sus futbolistas hasta con 14 días de antelación en caso de torneos oficiales. El 26 es el día fijado para que los costamarfileños marchen a Abidjan para iniciar la preparación de la competición, mientras que Stephen Keshi ha citado a los jugadores de Malí el día 27.

Junto a Kanoute viajará hasta Bamako el barcelonista Keita, mientras que Zokora y Romaric se van junto al también azulgrana Toure Yaya. Ni Sevilla ni Barcelona han logrado que sus selecciones lo cedan para la primera jornada del año 2010 y también se perderán los octavos de final de la Copa del Rey.

El Real Madrid, por ejemplo, pierde para este mes a Mahamadou Diarra, compañero de Kanoute y Keita en Malí. Se trata, así pues, de un problema global que afecta no sólo a los grandes clubes europeos, según Kanoute.

El delantero sevillista piensa que no es tan grave la ausencia de varios jugadores por este espacio de tiempo: "Faltar un mes dentro de un año no es mucho, hay que tener una plantilla amplia y, si se van tres o cuatro, los equipos con buenas plantillas pueden solventarlo. Es arriesgado si la plantilla es corta", reconoce a este diario el franco-malí, quien da ofrece su visión sobre cómo afecta este problema también a los jugadores africanos. Preguntado si es imposible trasladar la Copa de África a otro mes, adaptándola mejor al calendario FIFA, Kanoute responde así: "Todo el mundo quiere eso, y los primeros, los jugadores africanos, que son los que lo sufren. Yo he conocido muchos casos de jugadores, incluso yo, que cuando vuelven de la Copa de África pierden el puesto en el equipo y no vuelven a jugar hasta el final de la temporada. Ocurre muchísimo. Pero queremos jugar con nuestras selecciones, como todo el mundo".

El gran problema es la influencia del clima subtropical en el África negra, donde la media de temperatura es muy elevada durante el solsticio, sobre todo en el verano austral: "En África hay países en los que el verano es insoportable, es muy duro", reconoce Kanoute, quien aun así cree que debe haber soluciones e insta a buscarlas a medio o largo plazo: "Hay otras competiciones que se disputan en esta época en África, estoy convencido de que se puede encontrar algo para llegar a un consenso y hacer coincidir todos los intereses", asegura el atacante lyonés.

Malí estará en Angola al menos hasta el 18 de enero, día en que concluye la fase de grupos. Si es eliminada, Kanoute podría regresar para los partidos en casa frente a Almería y Valencia. Más largo se fía el concurso de Costa de Marfil, con un equipazo que es favorito para llegar a la final del 31 de enero. Si fuera así, Zokora y Romaric se perderían un total de cinco partidos de Liga (Atlético, Racing, Barcelona, Almería y Valencia) más los dos de Copa, que serían cuatro si el Sevilla logra eliminar al Barça.