El Atlético se impuso en Mestalla ante el Valencia por 0-2 en un duelo equilibrado en el que los locales mostraron una notable intensidad ante un rival que volvió a hacer gala de una sobresaliente solidez, a pesar de que Diego Alves le detuvo dos penaltis.

Aunque el partido comenzó con un ligero dominio del Valencia, la mejor ocasión fue para el Atlético en un pase de Gameiro desde dentro del área que Saúl Ñíguez remató de primeras y obligó a Diego Alves a emplearse a fondo a los siete minutos de partido.

En pleno acoso del Atlético, Diego Alves se vio obligado a repeler un duro disparo de Griezmann desde fuera el área en un momento del partido en el que el Valencia plantaba batalla, pero no inquietaba a Oblak.

Superada la media hora de juego, el Valencia logró controlar la intensidad del Atlético y vivió sus mejores momentos en el partido hasta entonces, con un Nani protagonista y que puso en apuros a la zaga atlética.

El partido vivió su momento más trepidante en los cinco últimos minutos del primer tiempo. Un riguroso penalti señalado a favor del Atlético, por una caída de Correa ante Nani, sirvió para que Diego Alves engrandeciera su leyenda al detener una nueva pena máxima, en esta ocasión a Griezmann.

En la siguiente jugada el Valencia dispuso de su mejor ocasión para abrir el marcador en un disparo de Rodrigo que detuvo Oblak para así cerrar una primera parte muy intensa.

Tras el descanso, el Atlético trató de aumentar su posesión de balón para encontrar espacios, pero el Valencia no le perdía la cara al choque y se mostró serio atrás sin olvidarse de buscar la meta del Atleti. Tras un intercambio de golpes sin mucho peligro para ambas porterías llegó el gol del Atlético. Fernando Torres, que apenas llevaba unos segundos en el campo, disparó con la izquierda, Alves despejó y su rechace fue a Gameiro, que asistió a Griezmann para que fusilara la portería local en el minuto 63.

Además, el Atlético disfrutó de otro penalti para aumentar su cuenta, pero Gabi corrió la misma suerte que Griezmann y se encontró con Alves, el mejor parapenaltis de la historia de la Liga (19 de 41 entre Almería y Valencia).

La parada despertó al Valencia, que había acusado el gol visitante cuando las fuerzas estaban equilibradas. Fue a por el empate, si bien la seguridad defensiva del Atlético fue un obstáculo infranqueable.

En los últimos minutos el Atlético, más cómodo con la ventaja del marcador, se mostró más entero ante un rival que plantó cara durante todo el choque, pero al que le faltó presencia ofensiva, aunque Oblak aún detuvo un cabezazo de Mangala en el 89. Así, en la última acción del choque el Atlético aumentó su ventaja con un gran gol de Gameiro, control, sprint y ejecución, a pase de Juanfran.