"El libro electrónico es la solución para bajar el precio"

-¿Mayo es un mes bueno para una Feria del Libro?

-Es un mes complicado, por las temperaturas. Hay lluvia y hace calor. Me gustaría más que las ferias del libro se hicieran en el periodo de pre Navidad o de Cuaresma, que es cuando se venden más libros, aunque en Cuaresma sería más complicado. En mayo no lo veo.

-¿Las ferias del libro sirven para algo?

-Depende del gremio. A las librerías les sirve para ventas. A los organismos, para propaganda. A las editoriales nos sirve como difusión. Sobre todo a las editoriales medianas o pequeñas como la mía, porque las editoriales grandes tienen otros canales de marketing.

-¿Son mejorables las ferias del libro andaluzas ?

-Las de Málaga, Cádiz o Granada, en general, tienen el mismo concepto que la de Sevilla. En algunas ciudades hay un problema de ubicación, que en Sevilla se ha resuelto, porque la Plaza Nueva es céntrica, el lugar ideal.

-En Madrid es diferente...

-Muy diferente. Hay firmas muy importantes, y eso beneficia a las pequeñas editoriales, porque llevan más público y te ven. A mí me encantaría que viniera Vargas Llosa a Sevilla, desde luego no me quitaría ventas.

-¿Por qué se le ocurrió crear una editorial?

-En el caso de Jirones de Azul, yo había sentido la necesidad antes. Como autora, me tuve que ir a Madrid y Montevideo para publicar. Vi lo difícil que era encontrar un hueco. Había editoriales locales, pero especializadas y cerradas en sus autores, donde no entraban jóvenes. Y las grandes confiaban en los consagrados. No había un puente entre eso.

-Y decidió arriesgarse…

-Pensé que había llegado el momento. Al cumplir los 40 años pensé que era ahora o nunca. Estaba dudando entre hacerla en Madrid o en Sevilla, y opté por Sevilla.

-Su editorial publica libros locales, pero no sólo.

-Queríamos tocar todas las teclas y buscar nuestro espacio. El hueco nuestro está en la literatura local con distintas miradas. No publicamos sólo libros de Semana Santa. Sevilla es una ciudad poliédrica, que se puede ver de distintas maneras. Una característica nuestra es que no nos importa abrir muchas colecciones, aunque sea con un solo libro, porque eso enriquece el catálogo.

-Han editado la vida de Blas Infante en cómic. Un proyecto arriesgado y elogiado.

-Somos valientes y nos lanzamos retos. Mi hermana Esperanza insiste en que los niños son los lectores del mañana. Hemos editado una guía para niños del Museo de Bellas Artes y estamos preparando una guía de Sevilla. Surgió el proyecto de hacer la vida de Blas Infante para niños, con el Centro de Estudios Andaluces, y nos encantó la posibilidad.

-No es una vida de tebeo...

-Es difícil hacer un cómic infantil de una vida con un final trágico, como es el fusilamiento de Blas Infante; por eso, no acaba ahí. Es un proyecto muy nuestro, porque el guión lo escribí yo, y mi hermana Esperanza y Begoña lo adaptaron al lenguaje de los niños. Y ha sido el descubrimiento de Nuria Barrera en su primer trabajo como ilustradora, ya que era más conocida como pintora de carteles de Semana Santa.

-Le publicó una novela a Mel, entrenador del Betis.

-Pepe Mel rompe el cliché que hay sobre el fútbol. Lee mucho, es intelectual, un apasionado de los viajes, le encanta la ópera…

-¿Pero se la publicó por ser entrenador?

-No soy aficionada. Cuando me llamaron, me dijeron que un tal Pepe Mel, frase textual, había escrito una novela. Pregunté quién era y me dijeron que el entrenador del Betis. Puede que se vendiera la primera edición por llamarse Pepe Mel. Pero apareció en noviembre y funciona muy bien, ya lleva cinco ediciones. Él no quería salir con un mal libro.

-¿Cuando empezó la crisis se vendían más libros?

-Al principio incluso aumentaban las ventas en Navidad, porque es un regalo barato y de prestigio. Pero en el último año, las medias de ventas han bajado un 50%. Nuestra editorial lo nota menos que otras, porque nacimos con la crisis.

-¿Los libros son caros?

-Sí, son caros. Le echan las culpas al editor. No saben que el editor le da un 50% al distribuidor. En caso contrario, no llegas a grandes librerías y centros comerciales.

-Algo ganarán...

-De ese 50%, un 30% es para la librería y un 20% se lo queda el distribuidor. Con el otro 50% hay que pagar la imprenta y la maquetación, y un 10% de los derechos al autor. Si la editorial gana un euro, por cada libro de 20 euros, estamos contentos.

-¿Y eso no tiene arreglo?

-La solución es el libro electrónico.

-El libro digital es polémico.

-Beneficia al editor, al autor y al comprador. Una novela de 19 euros debería costar 7 euros en libro electrónico. Para el autor es beneficio, porque puede llegar más lejos, incluso fuera de España. El editor evita costes, sobre todo imprenta y almacenaje. Al lector le sale más barato.

-Han tenido la habilidad de cobrar por los libros digitales, a diferencia de otros.

-El público es distinto, no es el que piratea la música. En el libro fue un proceso más lento, con más dudas. En los periódicos se hizo antes y mal. Ahora es complicado que el lector de un diario digital pague por algo que se le ha dado gratis.

-Vargas Llosa, en su último ensayo, defiende el papel.

-El libro de papel y el electrónico convivirán. Lo comparo al vinilo de los discos.

-¿Será algo exótico?

-No. El libro electrónico es como de usar y tirar. Son novelas que no vas a volver a leer, o libros técnicos que se quedarán obsoletos. Pero mis libros de cabecera, como La voz a ti debida, de Pedro Salinas, o bien Ojos de perro azul, de García Márquez, los quiero en papel, como objeto de culto, que uso; igual que Freewheelin, de Bob Dylan, lo quiero en vinilo. En eso hay un puntito fetichista.

-¿Qué le gustaría editar?

-Hay autores con los que quisiera contar. Pero lo que más me gustaría es repetir lo que ya vi una vez: que un chico de unos 14 años, con estética cani, pidiera unos euros a sus amigos porque vio un libro y le interesó. Eso me hizo sentir editora.