Los Mossos descuelgan las fotos de Puigdemont

Los Mossos d'Esquadra recibieron ayer una orden interna para retirar de sus comisarías las fotografías oficiales del hasta ahora presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y de cualquier miembro de su Govern, tras ser cesados en aplicación del artículo 155 de la Constitución, siguiendo el procedimiento habitual cuando hay cambios en el ejecutivo.

"Siguiendo instrucciones, desde la Jefatura de Policía informamos que se tiene que proceder a hacer efectiva la retirada de aquellas fotos de los ex miembros del Govern de la Generalitat de Cataluña a todas las comisarías y sedes oficiales de los Mossos d'Esquadra", indica el comunicado interno, que la jefatura de los Mossos remitió ayer a mediodía.

Tras destituir a la cúpula de la consellería de Interior, al director de los Mossos d'Esquadra y al hasta ahora mayor de la policía catalana, Josep Lluís Trapero, el Ministerio de Interior ha tomado el control del cuerpo y ha nombrado jefe al comisario Ferran López, hasta ahora número dos de Trapero.

En medio de este escenario, el sindicato mayoritario de los Mossos d'Esquadra, SAP-Fepol, pidió ayer al Ministerio del Interior que respete las competencias del cuerpo para continuar asegurando la tranquilidad y la convivencia de la ciudadanía de Cataluña. En un comunicado, lamentó que se haya acabado aplicando el 155 y que con ello se hayan visto afectados miembros del cuerpo, pero pidió tranquilidad a los agentes y que se trabaje "con la máxima serenidad" y profesionalidad.

Por su parte, el Sindicato de Mossos d'Esquadra (SME) -minoritario dentro del cuerpo- demandó ayer que, en el hipotético caso, que esperan que no se produzca, que se tuviera que detener al hasta ahora presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, la orden judicial llegara a la Guardia Civil o la Policía Nacional, y no a la Policía catalana.

El portavoz del SME, Toni Castejón, reconoció que una orden judicial "siempre se tiene que obedecer", aunque esperó que, si hubiera que detener a Puigdemont o a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, el arresto lo practicaran la Guardia Civil o la Policía Nacional. "A los Mossos no nos gustaría nada. Es una situación muy complicada, hay muchas sensibilidades, no nos gustaría", indicó.