Abogacía y música

Bajar del estrado y subir al escenario

  • Muchos abogados se dedican a la música como válvula de escape

  • De “Los imputados” a “Credit crunch”, sus grupos llevan nombres con connotaciones jurídicas 

Raimundo Amador  acompaña a Miguel Salas (a la derecha) en un concierto

Raimundo Amador acompaña a Miguel Salas (a la derecha) en un concierto

Muchos abogados sevillanos tienen la música como hobby y como una válvula de escape para relajarse del estrés del estrado judicial. Por unas horas se quitan la corbata y se enfundan en unos vaqueros, camiseta y gafas oscuras para dar rienda suelta a sus pulmones y a su creatividad. 

Oscar Fernández León toca la guitarra eléctrica en el grupo Los Imputados, donde los restantes miembros son economistas o empresarios. Cuenta a este periódico que ensayan en un garaje y tocan en bares y clubes, sobre todo música de los Rolling Stone, Beatles, Queen o The Doors. 

Aunque de estudiante tocó en la tuna, ahora lo hace “para desconectar del trabajo. Sales al escenario y desde los primeros acordes te centras y estás en un estado extraordinario. Allí hay amantes de la música y también tus amigos y tu gente. Sales del concierto con un chute de endorfina”.

Oscar Fernández León y Los Imputados durante un concierto Oscar Fernández León y Los Imputados durante un concierto

Oscar Fernández León y Los Imputados durante un concierto

José María Calero (guitarra), José Manuel García Quilez (piano) y Francis Martín (bajo) son tres abogados que llevan varios años tocando juntos, aunque últimamente se han visto obligados a dejarlo por sus compromisos profesionales con casos como el de los ERE o Lopera y el Betis.

El grupo empezó casi por casualidad en 2001 para celebrar el cumpleaños de Calero. Desde su primer nombre de Tócame algo ha pasado por varios y se ha especializado en son cubano y cantautores como Hilario Camacho, Serrat y Aute.

Con ellos cantó como solista durante un tiempo Carmen García Rivero, actual coordinadora del Servicio de Atención Jurídica Penitenciaria en Sevilla.  Está especializada en  rock, bossa y soul. Su grupo se llamó desde 2004 Rock for ever y desde hace un año Rewind.  Suelen tocar rock clásico pero ella también canta flamenco, Aretha Franklin y Luz Casal.

“Ni gimnasio, ni correr, no hay nada que te quite tanto el estrés como un buen ensayo o un concierto en el café-bar  La Tregua de Triana, afirma Carmen.

La abogada recuerda que al principio le dabe vergüenza que le vieran los clientes o funcionarios judiciales “y no me tomaran en serio” pero ahora su hobby es un motivo de orgullo e incluso cuando iba en la candidatura de Pablo Ollero al Colegio de Abogados de Sevilla, en 2014, hicieron un concierto de presentación.

Sus “jurídicas majestades” prefieren el rock de los 80

Javier Fernández de Mesa es también abogado y tiene un grupo denominado Band of Jacks porque el nombre de todos sus integrantes empieza por jota, entre ellos el también letrado José Antonio Morano.

Versionan pop y rock de todos los tiempos (Beatles, Eagles, Eric Clapton, Dire Straits).  Javier toca la guitarra eléctrica, acústica y la armónica y  afirma que prefiere los conciertos de tarde, cuando su público de entre 40 y 60 años acude a tomarse tranquilamente un cuba libre en un café  musical.

¿Por qué lo hacen? Javier responde que primero porque son amigos y luego porque “es una válvula de escape. Llevo 34 años ejerciendo la abogacía, es un trabajo muy intenso, de lunes a viernes a mediodía no hago otra cosa que trabajar”.

Miguel Salas, que es  abogado de muchos músicos, es también guitarra y solista de un grupo especializado en blues y rock. Su nombre siempre ha tenido connotaciones jurídicas: desde Credit Crunch (“crisis crediticia”) a Inside Job (por la  película traducida a español como Dinero Sucio). Ahora se llaman Fargo porque su repertorio incluye una música “muy norteamericana y Bob Dylan”.

Entre los integrantes de Fargo se encuentra el biólogo Miguel Ferrer. Conocidos cantantes como Pájaro y Raimundo Amador han ido a oirles y se han unido espontáneamente a sus conciertos.

Oscar Vázquez es un abogado de Huelva también colegiado en Sevilla. Toca la batería en el grupo La cuarta parte, dedicado al pop y rock español de los años 80. Su actual grupo se creó hace tres años y ha actuado en bares de Huelva, Sevilla y Mérida pero Óscar tocó antes con otras bandas. 

Pedro Pousada (guitarrista, bajo y teclado) es miembro de Adelphi, conjunto que se identifica con la etiqueta de indie pop. Al igual que la mayoría de sus compañeros, ensaya y toca cuando se lo permiten sus horarios como abogado. Ahora trabajan en varios proyectos como unas versiones de Pink Floyd y en La Otra Orilla, en el que van a coger “caras B” del pop español de los años 78 en adelante.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios