José Remesal ingresa en la Real Academia de la Historia

El historiador sevillano José Remesal unió Andalucía y el Imperio Romano en su discurso de ingreso en la Real Academia de la Historia, institución a la que ha llegado con el temor de "no ser capaz de corresponder a tanto favor". Catedrático de Historia Antigua de la Universidad de Barcelona, Remesal tomó posesión ayer de la medalla número 8 de la corporación, que había quedado vacante tras el fallecimiento en junio de 2009 del medievalista Julio Valdeón Baruque. "Tengo un ejemplo de virtud en mi predecesor. Preparando este debido homenaje, informándome de su vida y su obra, lo he sentido próximo, admirable como persona, discreto, humilde, amigo de sus amigos, capaz de escuchar a todos, capaz de estimular a muchos", señaló Remesal.

En su discurso de ingreso, titulado La Bética en el concierto del Imperio Romano, el historiador sevillano expuso los momentos en que se manifestó la interacción entre ambas partes, sobre todo a raíz de la ocupación romana de Galia y Germania. "Los recursos naturales de la Bética se convierten ahora en fundamentales para Roma", ya que la región tenía "las condiciones ideales para poderlos exportar: un río navegable, el Baetis, unas amplias costas y una ciudad, Gades, con los recursos marineros y los capitales necesarios para embarcarse en esta aventura", aseguró Remesal.

La relación alcanzó su cenit en el 98 d.C., cuando Trajano se convirtió en el primer hispano que accedía al poder imperial. "Ello pone de manifiesto el poderío, tanto político como económico, alcanzado por las élites hispanas en Roma", justificó el historiador. Tras una cruenta guerra civil a finales del siglo II, la dinastía hispana cedió el poder a una africana, comenzando el lento declive de Hispania en general, y la de Bética en particular, en las diferentes estructuras del Imperio Romano.

"Roma no podía prescindir de los recursos de la provincia. Pero el papel político preponderante que había tenido durante más de dos siglos había pasado a otras regiones", puntualizó Remesal en las últimas líneas de su discurso, que fue muy aplaudido.

La candidatura de ingreso estuvo avalada por los académicos Martín Almagro Gorbea, José Antonio Escudero y José María Blázquez Martínez, a quienes Remesal no olvidó dirigir su "agradecimiento más sincero".

El historiador también correspondió a maestros, profesores y colegas como Michel Ponsich, Emilio Rodríguez Almeida, Giovanni Forni, Géza Alföldy, Bernard Heukemes o Eric Birley, además de pronunciar un sentido recordatorio hacia sus alumnos: "Veo con orgullo que han alcanzado metas que yo no he sido capaz de alcanzar", elogió.

Nacido en Lora del Río el 27 de junio de 1948, Remesal es miembro del Bureau of the Union Académique Internationale y delegado para España de esta misma Institución, labor que compagina con su actividad en el Centro para el Estudio de la Interdependencia Provincial en la Antigüedad Clásica (Ceipac). Premio de Humanidades 2008 de la Institució Catalana de Recerca i Estudis Avançats (Icrea), el historiador es correspondiente del Deutsches Archäologisches Institut (Berlín) y de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras. Junto al profesor José María Blázquez, dirige además las excavaciones en el Monte Testaccio (Roma).

Años atrás, Remesal estuvo becado por el Instituto Rodrigo Caro (1973-75) y la Escuela Española de Historia y Arqueología de Roma del CSIC (1976); también fue becario del Consiglio Nazionale della Recerca (Roma) en 1977 y de la Alexander von Humboldt-Stiftung en Heidelberg con el profesor Géza Alföldy (1979-80).