Las invasiones bárbaras

Sieteatro. Texto y dirección: Pablo Canosales. Intérpretes: Patricia López, Ana Marrufo, Lina Noguero y Silvana Navas. Fecha: 20 de enero. Lugar: Sala Cero. Aforo: Casi lleno.

London Don, comedia desprejuiciada, busca ir calentándose mientras avanza y ofrecer al público algo del arte del vodevil: la réplica rápida, cierta socarronería ambiental, unas cuantas sonrisas blancas.

En esta historia de cuatro españolas en tierra extraña -un motel de Londres, donde las amigas han ido a pasar el fin de año- pesa un fuerte componente extra-teatral, y los arquetipos femeninos convocados responden a las presiones mediáticas de mujeres histéricas y desesperadas, un poco contentas de serlo. Lo más teatral de London Don, entonces, no está ni en el texto ni en la construcción de personajes, que, dicho sea de paso, responden a la superficialidad del género, sino en algunos tics físicos con los que las actrices completan sus roles y agujerean la escena. Y ése parece el fuerte de las jóvenes Patricia López, Ana Marrufo, Lina Noguero y Silvana Navas, su disposición a trascender el texto con una gimnasia capaz de distorsionar lo a veces previsible y tosco de las situaciones. No sé si son pequeños sabotajes, o restos del siempre bendito amateurismo, pero esos momentos generan el mejor humor de la obra. Es una bondad eterna del teatro que el cine siempre le envidió, la de ser un templo de entrada libre para el cuerpo y sus contorsiones. El resto depara un sano entretenimiento, quizás algo autocomplaciente y romo, que mezcla subtramas disparatadas para solaz de una audiencia que salió contenta.