Cuenta atrás inquietante

Inquietud rampante en clara progresión geométrica respecto al futuro de esa gran devoción universal que es la Macarena. Lo de aquella tardanza en volver cuando la Coronación habría sido una simple anécdota comparado con lo que está por venir. Tampoco los informes técnicos sobre el estado de la imagen invitan al optimismo y aquella reprimenda en forma de saeta que le echó Marta será poco. Cuánta preocupación ante esa intervención y cuánta desilusión por el tiempo que va a estar oculta. Cuántos macarenos van a entrar en estado de orfandad al ir a una Basílica sin su presencia. Será como una cuaresma sentimental el tiempo que dure la intervención. Un tiempo que quién sabe su duración y que tuvo su minuto uno aquel sábado en que se nos apareció una imagen sin nada que ver con esa Gioconda a lo divino. Y sólo cabe desear el éxito a quienes han de devolverle a la Esperanza ese halo de misterio por el que cada cual la ve según su propio estado de ánimo. Inquietante esta cuenta atrás, te fuiste por cuatro días...