Crónicas Levantiscas

Juan Manuel Marqués Perales

jmmarques@diariodecadiz.com

Boda republicana en la caseta del PCE

El partido de Yolanda Díaz anuncia en una nota el casamiento de un diputado de Sumar La muerte a pellizcos Euskadi bifronte

Yolanda Díaz y el diputado Francisco Sierra.

Yolanda Díaz y el diputado Francisco Sierra. / CD

SUMAR envió una nota de prensa el pasado viernes para anunciar la celebración de una “boda republicana” en la Pecera, que es la caseta del PCE en la Feria de Sevilla. Se casaban, según se leía en el texto escrito a modo de invitación, Francisco Sierra, diputado de Sumar por esa provincia, con Daniela Inés Monje, de la que nos cuenta el partido de Yolanda Díaz que es catedrática de Comunicación Política. La nota precisa que asistieron como invitados, entre otros, Antonio Maíllo, Toni Valero y Amanda Meyer. Estos últimos de Izquierda Unida (IU).

No es broma, el bodorrio era cierto, se celebró ayer, lo que aún no he descifrado es si la comunicación pública se debió a una broma de la catedrática, a una venganza contra los novios, a una intoxicación de alpiste, a una contracrítica a la boda aristocrática de José Luis Almeida o a un interés por subrayar el buen rollo de Sumar con Izquierda Unida, partido al que han mandado a un rincón en la confección de las listas europeas. Todo un símbolo, porque la caseta, el anclaje al terruño, es del PCE y de su hija, IU.

Hay un enfado natural entre los dirigentes de la vieja formación de Anguita porque los han relegado para poner por delante a toda la plurinacionalidad española, una gota más que puede hacer rebosar el vaso de este invento de Sumar que ni contenta a nadie ni funciona desde el punto de vista electoral, Galicia ha sido un fracaso, como lo será el País Vasco, mientras que en Cataluña ha cedido el espacio y el territorio a los comunes de Ada Colau, responsables del adelanto electoral catalán.

En el Gobierno de Pedro Sánchez le han perdido el respeto a Yolanda Díaz, los socialistas la inflaron después del dedazo de Pablo Iglesias, pero la ministra no pita, así que le quitan con total parsimonia la idea de eliminar las golden visa y le reprenden por un anunciado viaje a Palestina que, después, haría el propio presidente.

Yolanda Díaz también tuvo su momento estelar en la misma feria de hace dos años, cuando bajo la portada del real designó a Inmaculada Nieto como candidata a las elecciones andaluzas. Díaz disfrutó en la feria con cierto complejo, de ahí que resaltase que aquello simbolizaba la “pluralidad” de España, que debe ser una reformulación woke de las exaltaciones de los trajes y bailes regionales.

A la postre, Nieto fue la única parlamentaria de su grupo que pertenece a Izquierda Unida como independiente, los demás venían de la cuota morada que, claramente, ganó aquella negociación. Es la primera vez desde 1982 que en el Parlamento andaluz no hay un parlamentario militante del PCE. Y tiene caseta.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios