El mundo de ayer
Rafael Castaño
Volver
La ventana
HABRÁ durado una barbaridad, pues esta noche que acabamos de superar es la más larga del año para la grey infantil. Es una noche que se queda indeleblemente grabada en los arcanos de la memoria y en los tuétanos del alma. Recuerdos de nuestras primeras botas de fútbol, de aquel mecano que hacía nuestras delicias y nuestras nervioseras por el puñetero tornillo que se emboscaba y que no aparecía, de una amanecida prematura con el sol, seguramente, aún por cualquier rincón de Oriente. Es esto de los Reyes Magos algo que nos revitaliza, que nos retrotrae a un tiempo que nos trae un sentimiento de nostalgia y de añoranza, que hace que se agigante la figura de unos padres que ejercían quizá haciendo un esfuerzo que ellos hacían posible a lomos del amor. Hoy, la ilusión será la misma aunque los presentes sean otros, poco que ver con el mecano o a la bota dura, imposible de amoldar, de entonces.
También te puede interesar
Lo último
VENGO DE MI EXTREMADURA | CRÍTICA
Guadiana y Juanfra Carrasco en la Bienal: El cante errante
La ventana
Luis Carlos Peris
El Parque, esa fuente de inspiración
Tribuna Económica
Carmen Pérez
É xito exportador