PALABRA de iniciado es que el calvario que tendrá que soportar Zoido no ha hecho más que empezar. Los expertos en el día a día consistorial, conocedores de las alcantarillas municipales, han dejado bien claro que la huelga de Lipasam sólo ha sido la primera piedra de ese edificio que los sindicatos andan levantando en contra de la derecha que anida en la Plaza Nueva. Ahora ya anuncia jaleo la Policía Local, que como aperitivo anda con esas mascarillas puestas que ni siquiera abandonaron la tarde en que se honraba la memoria de Alberto y de Ascen. Y dicen esos iniciados que inmediatamente habrá huelga de instrumentos caídos, con perdón, para que la trifulca se remate en la rebelión contra los despidos que se anuncian en Isla Mágica. Zoido superó con éxito el primer envite, el de los basureros, pero el sindicalismo no ceja y el acoso seguirá ¿con derribo?