A los sesenta años, Curro en Lisboa

05 de julio 2018 - 02:30

Hasta el presidente de la República ha prometido su asistencia al festejo de esta noche en Campo Pequeño. Sesenta años después, Lisboa no olvida a Curro Romero por lo que fue capaz de hacer en aquel 4 de mayo de su debut en la Monumental lisboeta. Corría el año de 1958 y el camero era un novillero tan prometedor que había logrado sacar de sus casas a legiones de aficionados que habían oído hablar de su excelencia. Aquel día junto al delta del Tajo, Curro hizo enloquecer a la afición y él lo recuerda como si hubiese sido ayer. "Me hicieron dar cinco a o seis vueltas al ruedo y luego me llevaron en hombros hasta el hotel, que estaba a más de cinco kilómetros de la plaza". Hoy, Campo Pequeño le rinde pleitesía en los prolegómenos de una corrida que protagonizarán Morante y Manzanares mano a mano y un azulejo recordará un suceso de hace sesenta años.

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