Un cartel que humilla a las víctimas

El cartel promocional de la serie Patria, basada en la novela de Fernando Aramburu y que se estrenará próximamente, supone la enésima humillación a las víctimas del terrorismo y a todo lo que huela a España. Víctimas asesinadas y verdugos de ETA situados en el mismo plano moral. Los pistoleros y los muertos compartiendo protagonismo, en una atroz equidistancia.

Un asco inmenso. Un cartel que hace las delicias del canalla Otegi, Txapote o cualquiera de los brutales sicarios etarras. Un guiño a los asesinos que hoy quieren blanquear su relato. Una imagen que deben estar aplaudiendo los bilduetarras, hoy en las instituciones, tan necesitados de guiños como éste para reafirmarse en que el asesinato es un móvil legítimo para lograr fines políticos.

Con la simpatía del Gobierno socialcomunista y las bendiciones de Pablo Iglesias. Tengo entendido que ni siquiera el autor de la novela lo comparte. Pedro Sánchez, el peor presidente de nuestra democracia, no debe permitir que se maquille ni uno solo de los ataques cometidos por ETA a lo largo de su historia criminal, con sus más de 800 asesinatos sobre su conciencia.