El ex alcalde de Camas Agustín Pavón ha negado este lunes ante el jurado popular que le enjuicia por presunto cohecho que haya participado en el intento de compra de voto de la concejal Carmen Lobo y ha asegurado a este respecto que "bajo ningún concepto hubiera admitido" esa conducta porque “va en contra de sus principios”.

Agustín Pavón ha reconocido que intervino en dos reuniones, una de ellas celebrada en el Puesto de los Monos el 8 de agosto de 2005 y otra en la casa de Eusebio Gaviño el 18 de agosto, pero ha relatado que acudió a ambos encuentros porque a través del presunto intermediario el ex militante de IU Francisco Gordo -denunciante del caso- les había hecho llegar que había una sentencia que exculpaba a la concejal Carmen Lobo, cuya inicial condena había provocado su expulsión del equipo de Gobierno y de IU.

El ex regidor ha dicho que su presencia en esos encuentros era exclusivamente para "pactar las condiciones y la manera en la que se le pediría perdón a Carmen Lobo " y ha añadido que en la grabación se escucha cómo es Francisco Gordo quien habla de ganar dinero y de comprar el voto de la concejal, “los políticos no”, ha aseverado ante el jurado popular.

Agustín Pavón ha atribuido la denuncia del intento de soborno al "odio irremediable" de Carmen Lobo y Francisco Gordo hacia su persona, después de que decidiera expulsarlos de IU, y ha recordado una carta dirigida a los militantes de IU por Carmen Lobo en la que ésta le "amenaza con que le llegará su San Martín como a todos los cerdos", por lo que el ex alcalde ha afirmado que tenía “la certeza de que [Lobo y Gordo] se la tenían jurada”.

El imputado ha explicado que cuando se conoció la sentencia de la Audiencia de Sevilla que condenaba a Lobo por estafa procesal le pidió que renunciara a su acta de concejal, a lo que la edil aceptó inicialmente pero a los dos días cambió de opinión y cuando el alcalde le preguntó a qué se debía dicho cambio, Lobo le dijo que "lo hacía porque tenía miedo a Francisco Gordo", ha aseverado el ex alcalde.

Pavón ha explicado que acudió a la cita del Puesto de Los Monos, el 8 de agosto, porque el edil Antonio Enrique Fraile, también imputado en la causa, le comentó que un empresario del Aljarafe, Eusebio Gaviño, le había dicho que Carmen Lobo "tenía problemas internos dentro del PSOE y lo estaba pasando malW y además había una sentencia que declaraba su inocencia. Pavón ha explicado que fue a tomar "una cerveza", no a una reunión, porque la cuestión podía tener interés para el Ayuntamiento de Camas y si se había producido esa sentencia absolutoria su "obligación moral" era intentar que Lobo volviera a su partido político, después de haberla expulsado a ella y a Gordo del partido por “haberla inducido a no entregar su acta de concejal”.

En cuanto a la reunión en el chalé de Bormujos, el 18 de agosto de 2005, Pavón ha señalado que acudió igualmente porque supuestamente Francisco Gordo iba a llevar la sentencia y se iba a pactar la forma en la que se pedía disculpas a la edil Carmen Lobo, pero esa sentencia no se mostró nunca. Cuando el fiscal le preguntó por qué no se marchó entonces, Pavón ha subrayado que no lo hizo primero por "educación", dado que estaba en la casa de otra persona, y que decidió aguantar porque pensaba que, en la actitud "chulesca" de Gordo, éste le iba a “provocar para luego darle la sentencia y que se arrodillara para pedir perdón" a la concejal. 

El ex alcalde también ha relatado que cuando en esa conversación "Gordo de buenas a primeras dice que ha venido a ganar dinero y de que aquí lo que se trata es de comprar el voto de Carmen Lobo", los políticos mostraron su "incredulidad" y se sintieron "desorientados", respondiendo que no se trataba de comprar nada. Cuando Gordo insiste en una segunda ocasión con el asunto, Pavón dice que contestaron de "manera tajante" haciendo un primer intento de abandonar la reunión, pero el ex militante de IU siguió "intentando tirar el anzuelo"” y se montó una "bronca final", una "batalla campal" que "curiosamente" no aparece recogida en la grabación aportada por el denunciante, ha lamentado el ex alcalde. "Si se hubiera grabado ese final, el caso Camas no hubiera existido",  ha vaticinado Pavón, que ha asegurado que en ese momento se levantó y se dirigió a Gordo, llamándole "sinvergüenza" y diciéndole que "no quería verlo por la sede de IU" ni que contactara con los militantes de esta formación.

El ex regidor ha afirmado que incluso hubo un "intento de agresión" por parte de Francisco Gordo y ha insistido en que le resulta curioso que la cinta se corte en ese preciso momento.

Pavón ha dicho que delante de los políticos no se habló en ningún momento de que podría obtenerse una cantidad "por Pleno" y ha asegurado que desde que salió de la casa de Gaviño, el 18 de agosto, no volvió a tener más noticias hasta que se destapó el escándalo.

Por último, el ex alcalde ha indicado que "sospechaba" que Gordo pudiera estar grabando esa conversación y ha asegurado que no le dio “ninguna credibilidad” a esa reunión, que para él era un "teatro de tercera división", algo "dantesco", aunque después ha llegado a "entender" que la finalidad de la misma no era otra que "fabricar pruebas falsas" en su contra. "Jamás he propuesto reunir dinero o comprar a la concejal y Gordo no pudo conseguir que dijéramos: sí, vamos a comprar y a pagar", ha concluido el acusado.