La Policía confirma que Gaviño entregó un sobre con dinero a la concejal de Camas para que votara a favor de una "recalificación"

Un funcionario de Policía que intervino en el dispositivo de vigilancia establecido en torno a una de las reuniones que mantuvieron la ex concejal de Camas Carmen Lobo y el empresario Eusebio Gaviño ha confirmado este jueves ante el jurado popular que el presunto intermediario entregó un sobre con 12.000 euros a la edil a cambio de que votara a favor de una “recalificación” urbanística.

El policía ha explicado que la noche del 12 de septiembre de 2005 intervino, junto a una compañera, en la vigilancia de la reunión entre Carmen Lobo y Eusebio Gaviño en La Taberna Medieval, llegando a sentarse ambos agentes en lugar “próximo” a estas personas, desde el que pudo observar cómo el empresario entregaba un sobre y tan sólo unos minutos después de la entrega, la concejal se levantó para ir al servicio. La otra policía que formaba parte del dispositivo se acercó a los aseos y se identificó ante Carmen Lobo, quien le mostró el contenido del sobre, comprobando que había dinero aunque en ese instante no le comentó la cantidad, ha puntualizado el testigo.

Este agente ha relatado que, si bien él sólo pudo oír “frases sueltas” de aquella reunión, su compañera, que estaba más próxima, de espaldas a Lobo y Gaviño, le fue comentando lo que iba escuchando y que, según el policía, eran comentarios vinculados al “dinero” y también oyó cómo Gaviño le decía a Carmen Lobo que “no se preocupara, que lo único que tenía que hacer es dar su voto”. El agente añadió que la cuestión para la que se pedía dicho voto estaba relacionada “con una recalificación” urbanística.

La Policía tenía conocimiento, por la reunión que Gaviño y Lobo habían tenido esa misma mañana en el polígono el Manchón, de que se iba a producir una entrega a la concejal y los agentes que vigilaban el encuentro recibieron precisamente la orden de que estuvieran “atentos a un posible intercambio”.

En la sesión de este jueves también ha declarado el inspector jefe que dirigió la investigación del presunto cohecho en Camas y que ha ratificado que la concejal Carmen Lobo, tras reunirse con el empresario Eusebio Gaviño en el polígono el Manchón en la mañana del 12 de septiembre de 2005, “sabía” que se iba a reunir esa misma noche con Gaviño para recibir “dinero” e información sobre los puntos que debía votar favorablemente en el Pleno del Ayuntamiento del día siguiente. Este policía añadió que Lobo hizo entrega de un sobre con 12.000 euros que le había dado el empresario en La Taberna Medieval y que dicha entrega fue presenciada por dos agentes, aunque ha negado que le solicitara a la concejal que “actuara como cebo”.

El responsable de la investigación descartó que la finalidad de la reunión que tuvo lugar en la casa de Gaviño en Bormujos el 18 de agosto de 2005 fuese la entrega de una sentencia por parte del denunciante Francisco Gordo a los políticos –uno de los argumentos utilizados por los imputados para justificar las reuniones con el ex militante de IU-. “Es la primera noticia que tengo” de que se reunieran con esa finalidad, ha explicado el testigo, que ha señalado además que Gordo les entregó un mp3 y un CD con el contenido de la grabación y que comprobaron que éste era el mismo en ambos soportes.

Otro policía que participó en la investigación ha asegurado que desde el inicio de la investigación tuvo la “sensación de que no había dudas” de que se pretendía comprar la voluntad política de Carmen Lobo por varios motivos: “por el nivel de enfrentamiento personal que había, por la forma en que contactaron y por lo que se oía en la grabación”.

Este agente también ha confirmado que mientras se producía la reunión de Lobo y Gaviño en La Taberna Medieval, él se hallaba en el exterior del local en un dispositivo de vigilancia, lo que le permitió detectar la presencia de un vehículo que daba “vueltas sin mucho sentido en la calle Torneo y que cuando pasaba cerca ralentizaba el paso, por lo que apuntó la matrícula” y aunque en ese momento no conocía a los ex concejales implicados luego comprobó que se trataban de Antonio Enrique Fraile y José del Castillo.

El policía ha explicado que, a pesar de que cuando Gaviño entregó el dinero ya se había cometido un delito, no se procedió a su detención en ese momento porque no conocía a todos los posibles autores y no querían precipitar la intervención policial hasta conocer esos extremos. El testigo señaló que en un momento dado la investigación “se truncó” y se procedió a la detención de Gaviño y de los ex ediles Antonio Enrique Fraile y José del Castillo, y aunque no ha precisado cuál fue el motivo de esa interrupción de la pesquisas, en la instrucción figura que los arrestos se anticiparon porque en uno de los pinchazos telefónicos posteriores a la celebración del Pleno del Ayuntamiento se escucha a uno de los imputados diciendo que Carmen Lobo no había votado finalmente a favor y su interlocutor comenta que entonces habría que enviarle “un sicario”.

A preguntas de la defensa, este agente ha señalado que los únicos indicios que tenían del soborno eran precisamente las declaraciones de los denunciantes, la concejal Carmen Lobo y Francisco Gordo, y “una interpretación lógica y racional de lo que estaba ocurriendo allí”. Para el testigo, era “obvio” que las partes tenían una “enemistad manifiesta”, pero eso “no era óbice para que hubiese una tentativa de compra de voto”.

En la sesión de este jueves también han comparecido ante el jurado dos peritos propuestos por la defensa de Agustín Pavón, en concreto dos técnicos de sonido, que han puesto de manifiesto que en el mp3 que entregaron los denunciantes han detectado “cortes” en la grabación, en el sentido de que son “trozos de una conversación mayor” y además “faltan archivos que han sido borrados”, por lo que a su juicio “íntegramente no está todo en lo que en su momento se grabó” en este dispositivo electrónico.