Ryad Boudebouz no seguirá en el Celta. Así se lo comunicó el club vigués al Betis, según ha informado hoy La Voz de Galicia, después de que el franco-argelino llegase cedido en enero con una opción de compra.

Pese a que Boudebouz acabó entrando en los planes de Fran Escribá, el alto precio que se fijó en la operación -ocho millones de euros- unido a que su perfil ya está cubierto en la plantilla celeste, han provocado que el Celta no esté interesado en ejercer esa opción para que el zurdo continuase en tierras gallegas.

De esta forma, y salvo que algún equipo aparezca en los próximos días con una propuesta interesante para todas las partes, Boudebouz comenzará la pretemporada a las órdenes de Rubi y será el técnico catalán el que tome una decisión sobre su futuro. La idea del Betis sería la de traspasarlo, después de que su aportación desde su llegada en el verano de 2017 no haya sido la esperada, aunque el franco-argelino podrá cambiar ese criterio si acaba convenciendo al nuevo entrenador verdiblanco. El atacante tiene dos años más de contrato en Heliópolis, después de que firmarse por cuatro campañas, por lo que el jugador, que no está participando en la Copa de África con Argelia, esté a la espera de la decisión del Betis.

En el Celta, y pese a que fue expulsado en su estreno, Boudebouz acabó convirtiéndose en un jugador clave para la permanencia del cuadro vigués. Tras marcar ante el Huesca y oficiar de revulsivo ante la Real Sociedad para la remontada terminó siendo titular en seis de los siete últimos encuentros. Se marchó del Celta con un total de 716 minutos repartidos en once partidos, en los que anotó un tanto y repartió dos asistencias de gol.