Primer amistoso de pretemporada del Betis y primeros detalles de Luiz Henrique. La aportación del brasileño fue lo más destacado en el empate sin goles de los verdiblancos ante el Grödig para cerrar la concentración en Austria, demostrando su calidad tras entrar en la segunda mitad de un partido en el que los de Pellegrini fallaron mucho de cara a gol.

El partido empezó con ritmo, con un Grödig fresco que con una presión alta dificultó la salida de la pelota de un Betis que pasó apuros en el primer cuarto de hora. Primero, en un centro de Popovic que no acertó a despejar Égdar y que Ogunlade, con todo a favor para batir a Bravo, remató fuera (10’). Poco después fue Finder el que en una acción personal chutó desde la frontal para que Bravo volviera a detener la pelota (13’) y a renglón seguido fue, de nuevo, Ogunlade el que lo intentó con un disparo de media volea que atajó el meta chileno sin complicaciones (14’). A partir de ahí, el Betis empezó a tener algo más el esférico y a ser algo más reconocible en el campo. Canales y Marchena estaban en el doble pivote, y Joaquín, Juanmi y Fekir caían para dentro. Los carriles estaban libres y fue Álex Moreno el que más lo intentó.

Pero el peligro real bético lo generó Joaquín, que a la media hora, tras una buena acción, metió un pase atrás a Fekir que el galo enganchó con un disparo que detuvo el meta local sin complicaciones (28’). Una ocasión clara para los de Heliópolis, que poco después, de nuevo con Fekir como protagonista, gozaron de otra oportunidad para marcar. Fueron los mejores minutos del Betis, que llegó al área rival con muchos hombres, pero sin concretar ese peligro y cayendo mucho en fuera de juego (algunos muy dudosos). En los compases finales, el Grödig intentó quitarse de encima el ímpetu de un Betis que lo intentó en el descuento con una volea de Borja Iglesias que mandó el portero local a saque de esquina (46’). Fue lo más destacado de un primer tiempo con algo de ritmo de juego por parte de ambos equipos dentro del típico amistoso de pretemporada.

Sin embargo, en la segunda mitad sí se vio un mejor Betis. Un Betis dominador con mucha profundidad por las bandas y con un nombre propio, Luiz Henrique. El brasileño demostró detalles muy interesantes, con una muy buena técnica, y siempre dio sentido al juego. Desbordó con su velocidad y quedó claro que ha llegado con un punto de forma sobre sus compañeros fruto de sus partidos en con el Fluminense. Así, el joven jugador brasileño se sacó un zapatazo (62’) desde la frontal que acabó estrellándose en el palo en el primer aviso serio de los verdiblancos en el segundo acto, gozando poco después (68’) Willian José de otra oportunidad clarísima para marcar, pero su remate, tras una buena internada y pase de Miranda, se fue alto con todo a favor.

El Grödig se mostró incapaz de frenar el acoso bético y Luiz Henrique siguió mostrando sus buenas condiciones, de ahí que estuviera cerca de marcar (75’) tras recibir dentro del área y marcharse de un rival, pero su disparo con la zurda se le fue alto. Ya en los últimos minutos del partido, el ex del Flu volvió a aparecer con un disparo que se fue fuera buscando la escuadra (85’) y otro lejano que atrapó el portero sin complicaciones (88’). Sin duda, los buenos detalles de Luiz Henrique fue lo más destacado en el primer amistoso de un Betis que perdonó en la definición.

FICHA TÉCNICA

SV Grödig: Colic; Wienerroither, Lukacevic, Völkl, Schober, Finder, Ogunlade, Sfait, Füreder, Popovic y Hartl. También jugaron Kanzler, Limbauer, Diallo, Schober y Schöberl.

Betis: Bravo; Aitor Ruibal, Edgar, Víctor Ruiz, Álex Moreno; Marchena, Canales; Joaquín, Fekir, Juanmi y Borja Iglesias. También jugaron (segunda parte) Dani Martín; Montoya, Pezzella, Félix, Miranda; Guido, Guardado; Luiz Henrique, Rober, Loren; y Willian José. Luego entraron Visus, Álvaro Martínez, Lara, Paul, Sabaly y Rodri. 

Árbitro: Philipp Maier (austríaco). Sin amonestados.

Estadio: Stadion Grödig. Unos 300 espectadores, entre ellos un grupo de béticos.