El caso Zozulya vivió ayer un nuevo capítulo, después de que el Rayo, el Betis y el delantero llegasen a un acuerdo para rescindir el contrato de cesión que lo vinculaba con el equipo madrileño hasta finales de esta temporada, después de los problemas surgidos en su momento con los ultras del Rayo y que imposibilitaron su incorporación al equipo.

37 días ha pertenecido el ucraniano al club rayista, con el que no ha podido entrenarse por la oposición de los aficionados, lo que incluso llevó a que la Liga de Fútbol Profesional, como anunció su presidente, Javier Tebas, se querellase contra diez de ellos. Como había venido realizado días atrás con permiso del Rayo, Zozulya continuará ahora entrenándose con el primer equipo verdiblanco, a la espera de encontrar un destino.

"El Real Betis, el Rayo Vallecano y Zozulya han alcanzado un acuerdo para que el jugador ucraniano rescinda su contrato de cesión con la entidad madrileña. Zozulya se entrenará con el Real Betis mientras se estudian las diferentes alternativas existentes para que se incorpore a un nuevo equipo", informó el club verdiblanco, que siempre ha apoyado al delantero, que tiene dos años más de contrato con la entidad.

El presente para Zozulya pasa ahora por encontrar un nuevo equipo donde poder jugar hasta el final de la temporada, ya que en el Betis no puede hacerlo tras haberlo dado de baja en el último día del mercado invernal. Su agente está sondeando las ligas que abren ahora su periodo de fichajes, con la intención de que el delantero pueda estar en activo en estos meses, lo que incluso le abriría las puertas de la selección de Ucrania, donde también ha sido un fijo.

La FIFA, en un primer momento, sí autorizó el regreso de Zozulya al Dnipro, el club del que llegó con la carta de libertad al Betis, pese a que hubiera supuesto una cuarta inscripción en esta temporada, pero los problemas económicos del club ucraniano, sancionado por impagos por la UEFA, imposibilitaron esta alternativa.

Posteriormente, el máxima organismo del fútbol internacional amplió la autorización para que Zozulya pueda ser inscrito en otro cuarto equipo, lo que ha facilitado el acuerdo final entre el Rayo, el Betis y el delantero. Las ligas brasileñas y estadounidense podrían ser el destino final de Zozulya, al que tampoco ha favorecido toda esta polémica para encontrar un club donde continuar su carrera deportiva.