Medicamentos

Medicamentos opioides para la tos y el dolor con benzodiacepinas, una mezcla potencialmente mortal

Medicamentos opioides para la tos y el dolor con benzodiacepinas, una mezcla potencialmente mortal

Medicamentos opioides para la tos y el dolor con benzodiacepinas, una mezcla potencialmente mortal

La mezcla de medicamentos es una práctica que se hace de manera habitual entre la población. Los avances científicos han provocado que el arsenal terapéutico se vaya incrementando notablemente para el tratamiento de distintas patologías. Es más, cada vez es más habitual que se prescriban varios fármacos para el tratamiento de una misma enfermedad. El problema es que, en muchas ocasiones, se realiza sin prescripción médica y sin ser conscientes de los graves efectos que su interferencia puede provocar.          En este sentido, en los últimos días, varias noticias han girado en torno a la advertencia lanzada por la EMA, alertando sobre los graves efectos del uso prolongado de fármacos que combinan codeína e ibuprofeno.  A este respecto, la FDA también llegó a la conclusión de que el uso combinado creciente de medicamentos opioides con las benzodiacepinas u otros fármacos que deprimen el sistema nervioso central (SNC) ha tenido como consecuencia efectos secundarios serios y potencialmente mortales. 
Los opioides son una clase de narcóticos potentes que se usan para tratar el dolor lo suficientemente severo como para justificar su uso cuando no se pueden usar otros analgésicos o medicamentos para aliviarlo. El término opiáceos se utiliza para referirse a sustancias que tienen efectos similares a la morfina. Su efecto reduce la fuerza de las señales de dolor que llegan al cerebro. Estos a su vez afectan las áreas del cerebro que controlan las emociones. 
Sin embargo, su receta debe hacerse bajo una estricta supervisión médica ya que conlleva graves riesgos como el abuso, la adicción, la sobredosis y la muerte. Los opioides como la codeína y la hidrocodona también están aprobados en combinación con otros supresores de la tos o el dolor. Estos son los que pueden interferir más fácilmente en un tratamiento sin que el paciente se alerte de su peligro. 
Por otro lado, los ansiolíticos o benzodiazepinas, son medicamentos para tratar la ansiedad y otros trastornos mentales moderados. También los de acción corta se utilizan para facilitar el sueño. Pero la preocupación aún aumenta más, cuando se mezcla su consumo. Es decir, personas que mezclan OP para el dolor y BZP para dormir o para la ansiedad.

¿Por qué es peligroso?

Tener en cuenta que, tanto en un tratamiento individual como en comedicación, las benzodiazepinas  se metabolizan principalmente a través del CYP3A4 y los opioides a través del CYP2D6 y CYP2C19, principalmente. Por lo tanto, pacientes con alteraciones genéticas que afecten a estos genes condicionan menos actividad a las dosis correctas,  según los protocolos estándar. Estos tendrán ,por tanto, niveles plasmáticos mucho más altos de los esperados y un alto riesgo de efectos secundarios por sobredosis.
En ambos casos producen somnolencia, confusión y riesgo de muerte. Estudios recientes aportan referencias sobre sus graves efectos en su toma simultánea.  Uno de ellos informó que los analgésicos opioides causaron el 77 % de las muertes (identificadas las benzodiazepinas como causa de muerte) y las benzodiazepinas causaron el 30 % de las muertes (identificados los analgésicos opioides como causa de muerte).  En el 30% de todos los casos de muertes por sobredosis de opioides, los pacientes también estaban tomando benzodiacepinas.
Por otro lado, estudios recientes han demostrado que el uso concomitante de analgésicos opioides y depresores del SNC, incluido el alcohol, además de las benzodiazepinas también se asocia con efectos secundarios graves.

¿Qué hacer?

Los expertos recomiendan a todos aquellos pacientes que toman mezcla de estas dos familias de fármacos, que avisen inmediatamente al médico, o acudan a urgencias, si se presentan síntomas de mareos inusuales, somnolencia extrema, respiración lenta o difícil, o falta de respuesta cuando se les habla, pues de agravarse puede haber riesgo de muerte.
Concretamente la FDA dice textualmente: ''Los profesionales sanitarios deben limitar la prescripción de analgésicos opioides con benzodiacepinas u otros depresores del SNC, sólo indicado para pacientes en los que las opciones de tratamiento alternativo son inadecuados''. 
Por tanto, la solución más segura es que los profesionales de la salud deben limitar el uso de benzodiacepinas u otros analgésicos opioides depresores del SNC en pacientes que toman benzodiacepinas u otros depresores del SNC, incluyendo alcohol. Si estos medicamentos se recetan juntos, porque no exista otra alternativa, lo ideal es limitar la dosis y la duración de administración al nivel más bajo posible mientras se logra el efecto clínico deseado.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios