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Las agujetas pueden ser de las cosas que más tememos a la hora de iniciarnos en un entrenamiento funcional, pero debes saber que si te has llevado un tiempo de vida más sedentaria, retomar una rutina deportiva te va a llevar a tenerlas, al menos los primeros días.
Las agujetas son una sensación de dolor o molestia muscular que suelen aparecer después de realizar ejercicio físico intenso, especialmente cuando se trabaja un grupo muscular que no se ha utilizado con frecuencia o el mismo ha sido sometido a una carga más intensa de lo habitual.
"Pueden durar entre 2 y 5 días, dependiendo de lo fuerte que haya sido el entrenamiento y de tu nivel de forma física"
Sea cual sea la situación, puede ser normal que aparezcan porque a veces la musculatura se somete a un esfuerzo mayor y el cuerpo lo nota. Sin embargo, el hecho de que sea normal no quiere decir que en cada sesión tengas que salir tan mal como para que ya no seas capaz de poder moverte.
Es normal tener agujetas, sobre todo si haces un ejercicio nuevo o más intenso de lo habitual, ya que tenerlas son una señal de que tus músculos están trabajando y adaptándose al esfuerzo, pero no es cierto el mito de: "Sin agujetas no has entrenado", asegura Miguel Ángel Romero Mejías, técnico deportivo y director del centro de entrenamiento MyTrainer.
"Se recomienda entrenar fuerza al menos 2 a 3 veces por semana para estar en forma y cuidar tu salud"
"Al final es normal notar algo de carga tras un entrenamiento más forzoso, pero hasta cierto modo. Si no aparecen, mejor", aclara. Es importante empezar con un buen calentamiento, que incluya movimientos para preparar las articulaciones y estiramientos suaves.
"Cuando empieces el entrenamiento, usa pesos ligeros y concéntrate en hacer los ejercicios correctamente antes de aumentar la intensidad", aconseja el técnico deportivo para evitar lesiones.
Además, para ir acostumbrando al cuerpo y después como rutina habitual, "se recomienda entrenar fuerza, al menos de 2 a 3 veces por semana, para estar en forma y cuidar tu salud. Así trabajas todos los músculos y te mantienes fuerte y saludable", apunta el técnico.
Las agujetas suelen aparecer entre las 24 y 48 horas después de hacer ejercicio y, según el director de MyTrainer, "pueden durar entre 2 y 5 días, dependiendo de lo fuerte que haya sido el entrenamiento y de tu nivel de forma física o sobre esfuerzo".
Lo importante es estar motivado y pensar que entrenar tiene sus beneficios tanto para el físico como para la mente y no hay que obesionarse con la práctica deportiva. Se trata de cuidar a tu cuerpo porque lo quieres y quieres que esté sano, no para castigarlo por los excesos de las vacaciones ya que, cuando haces eso, es cuando aparecen las agujetas que tanto tememos.
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