La entrada del otoño ha irrumpido con fuerza en un año en el que se trataba de recuperar cierta normalidad tras un largo período de confinamiento y restricciones. Sin embargo, la estación del entretiempo ha traído de la mano  procesos víricos que parecen estar más a la orden del día que nunca. Tras la vuelta al cole y con la llegada de los primeros fríos, los virus han irrumpido con fuerza en las aulas como consecuencia de la relajación de las medidas sanitarias contra el Covid y el aumento de la interacción social de los alumnos.

Además, los más pequeños no tienen la obligación de llevar mascarilla en el interior de la clase, por lo que es más fácil que se propaguen los virus, bacterias y otros microorganismos. Los expertos ya han advertido cuáles están siendo los más comunes en sus consultas. Te los contamos.

Boca-Mano-pie

Uno de los virus clásicos de esta época es el conocido como boca-mano-pie, una enfermedad muy contagiosa entre bebés y niños más pequeños al estar su inmunidad en pleno fase de desarrollo.  Se trata de una infección viral frecuente y leve que se caracteriza por la presencia de ampollas rojas y dolorosas en boca, garganta, manos, pies y área del pañal, además de algo de fiebre y molestias en la garganta.

Algunos síntomas pueden ser similares a los de la gripe pasados unos días tras el contagio y pueden incluir fiebre, pérdida de apetito, malestar general o dolor de garganta. Se propaga fácilmente por las gotitas respiratorias al toser o estornudar, por el contacto directo con una persona infectada o por el contacto con superficies y objetos contaminados.

"Este año el virus ha entrado con fuerza en los colegios, con nuevos síntomas como fiebres muy altas, mucosidad y faringitis. Muchos padres están llevando a los niños al cole con síntomas y se está extendiendo como no lo había hecho años previos a la pandemia", ha señalado Pilar M., una pediatra de Atención Primaria consultada por Europa Press.

Bronquiolitis

Los expertos comentan que ha habido un brote inusual de bronquiolitis, un virus respiratorio que suele darse en los meses de invierno. Mientras que el año pasado apenas hubo casos en su época habitual, lo cierto es que el virus respiratorio sincitial (VRS) origina cada año una epidemia en las consultas de atención pediátrica por los casos de bronquiolitis aguda en niños y niñas menores de dos años.

Según Mayo Clinic, la infección pulmonar es común en niños pequeños y bebés, causando inflamación y congestión en las pequeñas vías respiratorias (bronquiolos) del pulmón. Comienza con síntomas similares a los de un resfriado común, pero luego presenta tos, sibilancia y a veces dificultad para respirar. Los síntomas de la bronquiolitis pueden durar de varios días a semanas.

No suele tener complicaciones pero es importante  medidas de higiene básicas en las aulas y guarderías.

Gripe y resfriado

La gripe y el resfriado común son dos enfermedades típicas provocadas por virus que aparecen con fuerza a partir del otoño y cuya incidencia se incrementa en los meses de invierno debido, sobre todo, a los factores ambientales.

Los médicos ya advierten que durante el invierno se prevé complicado en la Atención Primaria debido a que llegará la epidemia de la gripe, enfermedad que durante la pandemia ha estado poco presente. La diferencia más visible entre ambas enfermedades es la intensidad de los síntomas. Al contrario que el resfriado, la gripe es mucho más intensa y debilitante y puede provocar fiebre alta durante tres días o más. 

Los síntomas más característicos de la gripe son los siguientes: escalofríos, dolores musculares (mialgia), dolor de cabeza, secreción nasal, malestar general y cansancio y, en ocasiones, diarrea y vómitos.  En la gripe la fiebre es moderada o alta.

Las manifestaciones clínicas de un resfriado o catarro son mucho más leves que en la gripe. Uno de los síntomas más frecuentes es la mucosidad nasal acompañada de estornudos.  El resfriado apenas provoca fiebre, o si lo hace es muy baja, y genera malestar general y cansancio. 

Gastroenteritis

La gastroenteritis viral es una infección intestinal que se caracteriza por presentar diarrea líquida, cólicos estomacales, náuseas o vómitos y, a veces, fiebre.Durante este otoño, los virus gastrointestinales están provocando brotes entre los más pequeños que han precipitado los contagios entre los adultos. También se están detectando casos en lactantes. 

La forma más habitual de desarrollar gastroenteritis viral, generalmente llamada gripe estomacal, es a través del contacto con una persona infectada, o por ingerir alimentos o agua contaminada.

Su periodo de contagio varía mucho entre sus diferents tipos, pero la mayoría se transmite con mucha facilidad mientras el niño tiene diarrea. Por eso, en caso de gastroenteritis, se recomienda que no acudan a la escuela hasta pasadas 24-48 horas sin síntomas.