Es indiscutible la repercusión que ha tenido la iniciativa del Cerro del Águila para este Martes Santo. Sus cuatro bandas dejarán de tocar en la entrada al centro de la ciudad. Habrá un tramo en el recorrido de la cofradía donde las personas con trastorno del espectro autista (TEA) e hipersensibilidad podrán disfrutar de las imágenes sin música. 

Esta idea inclusiva se hará realidad gracias a Manuel Bayón, médico de familia y miembro de la Junta de la hermandad y a Daniel Plaza, director técnico de la Asociación Sevillana de Síndrome de Asperger, primer centro específico en España para la atención a esta enfermedad.

"Todo comenzó en la barra de un bar después de un ensayo de costaleros. Un hermano del Cerro del Águila me comentó con tristeza que tenía un familiar con trastorno del espectro autista que sólo podía ver cofradías que fueran en silencio", explica Bayón. "Ahí fuimos conscientes de que este problema había que visibilizarlo".

Los niños con TEA e hipersensibilidad no pueden estar en lugares donde se aglomere mucha gente. La extrema sensibilidad de estas personas cuando hay luces, ruidos o sonidos con un volumen muy elevado como es el caso de una banda de música, se convierte en un "arma arrojadiza" para ellos. Por este motivo y por la comodidad de tener el metro cerca, el trayecto sin música será desde el Prado de San Sebastián y finalizará en la Puerta Principal del Rectorado. Al tratarse de una avenida grande, la tranquilidad para los niños y las familias es mucho mayor. 

"Tenemos a más e 600 familias con niños diagnosticados con asperger. Este tipo de iniciativas hacen de Sevilla una ciudad mejor", ha comentado Daniel Plaza. "Sería maravilloso que el resto de hermandades se sumaran a este proyecto. Todos merecen disfrutar de una de las semanas más bonitas de la capital".

Por otra parte, la Hermandad de Jesús Despojado fue la primera en llevar a cabo esta iniciativa. El año 2020 la cofradía habría transcurrido en silencio en el tramo comprendido entre el final de la calle San Pablo y el inicio de la calle Murillo, pero la pandemia lo impidió. Fue en 2021 y 2022 cuando la hermandad consiguió hacer su estación de penitencia teniendo en cuenta a los niños con TEA, andando en silencio por determinados tramos.

Rafael Aranda, hermano mayor de la hermandad, afirma que "este año Jesús Despojado no va a ir en silencio en ningún momento".

Camino a una Sevilla más inclusiva 

No es la primera vez que esta asociación se involucra con los niños con Trastornos del Espectro Autista. Fue en 2019 cuando Daniel Plaza y su equipo consiguieron que en la Feria de Abril hubiesen cuatro horas sin música excesivamente alta en la ruidosa Calle del Infierno. 

La delegación de Fiestas Mayores acordó con la Asociación Asperger-TEA Sevilla y la Asociación de Empresarios Feriantes de Andalucía, Ceuta y Melilla las condiciones para que esta idea pudiese llevarse a cabo.