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Sevilla

Amplían el campo de prácticas de los Bomberos en el Puerto de Sevilla

  • El Ayuntamiento de Sevilla adquiere cuatro nuevos contenedores adaptados por un importe de 135.000 euros

El delegado de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, con los bomberos en el Puerto.

El delegado de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, con los bomberos en el Puerto. / Ayuntamiento de Sevilla

El Ayuntamiento de Sevilla ha ampliado el campo de prácticas del servicio de Bomberos, con una inversión de 135.000 euros, con cuatro nuevos contenedores adaptados para formación en técnicas de control de incendios en los que simular cualquier tipo de escenario de incendio estructural que se pueda plantear. Está ubicado en el Puerto.

El delegado de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana, Juan Carlos Cabrera, ha visitado este lunes este campo de prácticas con motivo de la finalización de este proceso de mejora. Durante la visita, el delegado ha recordado que "en 2018, comenzaron a realizarse las primeras prácticas de incendios en interior en este campo de prácticas", en el que se acumulan hasta 2.000 horas anuales en formación de incendios. Con esta nueva inversión, reforzamos la formación continua de los Bomberos, con la que se consigue una mejora notable".

Igualmente, en una nota de prensa remitida por el Consistorio, Cabrera ha destacado "la apuesta que la ciudad viene haciendo por reforzar tanto los recursos humanos como los medios materiales del Servicio de Bomberos, con la previsión de finalizar el mandato con 83 incorporaciones y una inversión de más de 6,5 millones de euros en los últimos años en renovación de flota y equipamientos, la más importante que se ha realizado hasta ahora".

Hasta ahora, los efectivos del servicio de Bomberos han estado trabajando y practicando múltiples técnicas de control de incendios de interior en este campo de prácticas con los contenedores existente. Con este nuevo edificio, ahora pueden trabajar la táctica de la intervención, es decir, el movimiento de mangueras, la ubicación de vehículos, la coordinación de las diferentes dotaciones que intervienen, así como el mando y control de la intervención.

La adquisición de los cuatro nuevos contenedores permite desarrollar la formación en el ámbito del control de incendios estructurales o incendios de interior de forma integral, abarcando desde las técnicas de control de incendios, hasta las resultantes de la combinación operativa de diferentes técnicas. También posibilita llevar a cabo el análisis de las diferentes fases de evolución de los incendios de interior, junto con los fenómenos causados por evoluciones violentas de estos.

Los nuevos contenedores se han dispuesto formando una estructura que simula un edificio, de forma que permite trabajar en dos niveles. Los contenedores, de 40 pies, están divididos interiormente por mámparas metálicas con puertas de paso y unidas entre sí con planchas formando pasillos y dependencias interiores. Todo ello permite realizar diversos recorridos, mediante una escalera que comunica los dos niveles. También cuenta con ventanas y puertas distribuidas de forma conveniente para ejecutar los ejercicios.

El fuego se origina en la zona habilitada para la disposición de los paneles de madera aglomerado sin aditivos, que desarrollan el incendio, denominado motor de incendio, propagando el calor y humos por las distintas dependencias, pero controlado por medio de puertas y aberturas que permiten trabajar en escenarios distintos. Esta estructura permite una mayor especialización del personal que ha venido formándose en los contenedores aislados de los que ya disponía el servicio.

El servicio cuenta con instructores expertos en la ejecución de los ejercicios en esta instalación, permitiendo la formación de todo el personal operativo donde se desarrollan las prácticas de control y extinción de incendios, búsqueda y rescate de personas en el interior.

A esto se suma la adquisición de una nueva sonda destinada a la embarcación del servicio de Bomberos del Ayuntamiento con un presupuesto de 5.500 euros. La nueva sonda muestra las señales que devuelve del fondo a la superficie permitiendo una visión nítida del lecho de la dársena, permitiendo la localización e identificación de materiales y objetos depositados en el fondo. Además, dispone de gráfico y registro de la temperatura del agua.

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