Sevilla

Vecinos de Ronda Triana advierten de que el edificio está a medio milímetro de posibles daños

  • Los residentes en la calle Manuel Arellano han acudido al Defensor del Pueblo, Chamizo, para dar cuenta de los movimientos y filtraciones de agua que sufren los edificios por las obras del aparcamiento.

Los vecinos pertenecientes a la Intercomunidad de Propietarios afectados por las obras del aparcamiento de Crucero Baleares, de los números 32 y 34 de la calle Manuel Arellano, en la Ronda de Triana de Sevilla, han recurrido por primera vez a una instancia externa al Ayuntamiento hispalense --el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo--, después de que el desplazamiento detectado en su inmueble haya alcanzado los 46,5 milímetros, a medio de que existan riesgos de daños graves.

La portavoz de los vecinos afectados, Concepción Sánchez, indicó a Europa Press que, a día de hoy, constituye un "jarro de agua fría" el hecho de que, contrariamente a lo que les aseguró el concejal de Movilidad, Francisco Fernández, sobre la contratación de Geotecnia y Cimientos SA (Geocisa) para realizar un estudio de las necesidades de consolidación que requiera el terreno aledaño al aparcamiento una vez concluya su construcción, "hemos sabido por distintas consultas que la contratación no se ha llevado a cabo".

Con todo, Sánchez apuntó que los residentes afectados se encuentran "a la espera" de que por parte del Consistorio se fije una fecha para poder tener acceso a los contenidos de ese informe, criticando en este sentido que "una vez más, se nos alarga el asunto".

Sobre la visita a Chamizo, la portavoz vecinal se manifestó satisfecha de que el Defensor del Pueblo Andaluz les mostrara su "incomprensión ante los hechos sucedidos" en el edificio, donde se ha podido constatar como los movimientos siguen después de que las últimas mediciones hayan arrojado una desviación de 66,5 milímetros hacia el Oeste --a los que hay que descontar los 20 de la junta de dilatación-- y de 39 milímetros hacia el frente (Sur).

Por ello, Sánchez dijo estar a la espera de una nueva medición propia para confirmar la evaluación de la situación, donde criticó, una vez más, las numerosas filtraciones de agua que han aparecido de nuevo, "y que podrían conllevar la debilitación de los cimientos".    

Según los datos desprendidos del informe de un arquitecto independiente encargado por los propios residentes, el nivel de desplazamiento en el que ya existiría un riesgo de daño grave está establecido en 67 milímetros. 

El concejal de Movilidad, por su parte, aseveró haber trasladado a los vecinos en la última reunión mantenida que tras reforzarse las pantallas de la estructura, se reanudarían las excavaciones bajo un riguroso protocolo de seguridad que implicaría el sellado de juntas cada 50 centímetros. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios