La berlina de Prim y el tren de Canalejas
Calle Rioja
Hoy se cumple un siglo del atentado, en un año que también tuvo Olimpiadas, huelga y ganaron los demócratas en EEUU.
EN 1912, como un siglo después, también fue año bisiesto, hubo Juegos Olímpicos (en Estocolmo), los demócratas ganaron las elecciones en Estados Unidos y hubo huelga en España, pero en los ferrocarriles. José Canalejas llegó a la política desde el mundo ferroviario, igual que Abraham Lincoln, y como éste, murió asesinado en un atentado que tuvo lugar hace justamente cien años. 12 de noviembre de 1912. El entonces presidente del Gobierno, que había ocupado casi media docena de carteras ministeriales, salía de despachar con el Rey Alfonso XIII. Autor de libros de temas tan diversos como la literatura latina o el derecho parlamentario comparado, estaba mirando el escaparate de la librería San Martín, en la puerta del Sol, cuando el anarquista Manuel Pardiñas le disparó tres veces en la espalda. Dos días después el Rey nombró a su sustituto, el conde de Romanones.
Sevilla le dedicó a Canalejas una calle en el corazón comercial de la ciudad. En la calle Canalejas se encuentra el hotel Colón, el de los toreros. El año que mataron a Canalejas, Joselito el Gallo tomó la alternativa en la Maestranza y Juan Belmonte llevaba uniforme de soldado. El Gobierno presidido por Canalejas aprobó el servicio militar obligatorio que casi un siglo después derogaría el Gobierno conservador de José María Aznar. Su muerte le impidió cerrar las reformas políticas que alentó para acabar con el caciquismo y el fraude electoral.
José Canalejas Méndez nació el 31 de julio de 1954 en Ferrol, la patria chica del historiador José Luis Comellas, que fue catedrático en la Universidad Hispalense y que recientemente, en la casa de los Pinelo, reivindicaba su paisanaje con el político asesinado, hijo como él de la misma ciudad en la que nacieron personajes tan contrapuestos como Pablo Iglesias o Francisco Franco y el novelista Gonzalo Torrente Ballester. En 1912 Sevilla sufrió unas severas inundaciones, que inspeccionó en persona el rey Alfonso XIII. En pleno regeneracionismo cultural, fue un gran año para la arquitectura de la ciudad: empezaron las obras del parque de María Luisa, Aníbal González comenzó el proyecto de la plaza de América y sus tres pabellones para la Exposición de 1929. Los arquitectos José Espiau y Antonio Arévalo iniciaron los trabajos para la Farmacia Murillo del Altozano y el Laboratorio Municipal, respectivamente.
En 1912, Miguel Sánchez Dalp presentó el proyecto para el traslado del recinto de la Feria de abril desde el Prado a los Remedios. No se pudo llevar a cabo hasta 1973, el mismo año del atentado contra el almirante y presidente del Gobierno Luis Carrero Blanco. Canalejas tuvo el mismo cruento final que Prim o Cánovas del Castillo. El atentado contra Prim, sus antecedentes e investigaciones ha sido objeto de recientes novelas de José Calvo Poyato y Ian Gibson, autor de La berlina de Prim. 1912 fue un año interesante para las letras. El Nobel de Literatura lo ganó el alemán Gerhart Hauptmann, Thomas Mann publicó Muerte en Venecia y Antonio Machado Campos de Castilla. El poeta sevillano, tras la muerte de Leonor, llegó ese mismo año como catedrático de Francés a un instituto de Baeza.
La calle Canalejas más famosa de España es la de Cádiz. La inmortalizó la chirigota El que la lleva la entiende, vulgo los Borrachos, con un famosísimo cuplé: "Iba por Canalejas, por la acera del muelle; con una risa que me llegaba de oreja a oreja". Pese a su cuna gallega, Canalejas fue diputado por Cádiz (también por Soria y por Alicante) y en la Presidencia del Gobierno sustituyó al político gaditano Segismundo Moret. El mismo día que lo mataron, a miles de kilómetros de distancia, aparecieron los cadáveres de los que acompañaban al capitán Scott al Polo Sur: murieron congelados a 17 kilómetros de alcanzar su objetivo. Hoy se recuerda a un político liberal que tuvo un gran protagonismo en la política nacional e internacional, que a partir de la crisis del 98 dejan de ser sinónimos. Su principal legado fue la firma con Francia para el protectorado de Marruecos.
También te puede interesar
Contenido Patrocinado
Contenido ofrecido por el Ayuntamiento de Rota
Contenido ofrecido por Nervión Plaza
Contenido ofrecido por Restalia