Los padres de Marta piden 10 años al hermano de Carcaño

La familia insiste en que Javier Delgado es el cerebro que diseñó la operación para deshacerse del cuerpo de la joven

Javier Delgado, hermano de Miguel, cuando salió de prisión.
Jorge Muñoz

18 de mayo 2011 - 05:03

La familia de Marta del Castillo presentó ayer su nuevo escrito de acusación contra los cuatro adultos imputados en el asesinato y desaparición de su hija. La principal novedad de la nueva acusación, que se produce después de que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ordenara que el caso sea enjuiciado por un tribunal profesional, consiste en que los padres de Marta han incorporado a su acusación el delito contra la integridad moral que introdujo la Fiscalía de Sevilla por haber incrementado el dolor y el daño moral de los familiares al no haber podido recuperar el cuerpo.

Con este nuevo escrito de conclusiones provisionales, el abogado José María Calero, del bufete Montero Aramburu, reclama una condena de 52 años y cinco meses de cárcel -antes pedía 50 años y cinco meses- para el asesino confeso, Miguel Carcaño, al que atribuye un delito de asesinato, dos de agresión sexual, otro de profanación de cadáveres y el último contra la integridad moral.

Para su hermano, Javier Delgado Moreno, la familia de Marta reclama una condena de diez años de prisión -dos más que antes-, por los delitos de encubrimiento, amenazas al Cuco y contra la integridad moral.

La acusación particular sostiene que todas las operaciones encaminadas a hacer desaparecer el cuerpo "fueron dirigidas" por Javier Delgado, "de más edad y experiencia" que los otros imputados por su condición de vigilante de seguridad. Dice la familia de Marta que para "asegurar un pacto de silencio entre todos" los imputados, la misma noche del 24 de enero de 2009 el hermano de Carcaño amenazó al Cuco, diciéndole que "le iba a pasar algo muy grave a su familia" si contaba lo sucedido aquella noche en el piso de León XIII.

Para los otros dos implicados, Samuel Benítez, amigo íntimo de Miguel, y María García Mendaro, la acusación particular ha pedido ahora una condena de cinco años de cárcel para cada uno, por los delitos de encubrimiento, profanación y contra la integridad moral.

En cuanto a cómo se produjo el asesinato de Marta, la familia de la joven insiste en la participación del Cuco, a pesar de que éste ha sido absuelto en el juicio celebrado a principios de este año, si bien la sentencia está recurrida ante la Audiencia de Sevilla. La familia sostiene que Miguel y el Cuco, después de haber ingerido algunas bebidas alcohólicas y fumar algún cigarrillo de hachís, comenzaron a agredir con "golpes, puñetazos y patadas" a su amiga Marta, que se vio "sorprendida, atrapada e indefensa ante la brutal violencia de éstos". Después de violarla, amenazándola con una navaja, la acusación particular relata que fue el Cuco quien acabó con la vida de Marta, asfixiándola con el cable de una alargadora, mientras Miguel Carcaño sujetaba a la víctima.

Tras haberla asesinado y comprobar que había fallecido, para lo cual le colocaron un tensiómetro que había en el piso de Miguel, ambos "buscaron ayuda para limpiar los vestigios" que pudieran quedar en el piso y para deshacerse del cadáver, contactando con los otros tres imputados adultos.

La acusación reclama una indemnización de 780.000 euros, de los que la mayor parte -480.000 euros- responsabiliza a Carcaño.

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