Más de la mitad de las 13 viviendas sociales rehabilitadas del corral de la Encarnación, ubicado en pleno barrio de Triana, siguen vacías y esperando a los inquilinos con pocos recursos económicos para los que el Ayuntamiento de Sevilla recuperó este inmueble, a pocos metros de la Corrala Libertad, el edificio de la calle Evangelista ocupado en diciembre por el 15-M para otras siete famillias afectadas por embargos y deudas.

Hay ocho viviendas desocupadas a día de hoy -lo pudo comprobar este jueves este periódico y lo ratificó el Ayuntamiento- y hasta finales de diciembre pasado eran nueve las que seguían vacías. También están vacíos y sin uso los dos locales que iban a destinarse a equipamientos para los vecinos de Triana.

El corral se estrenó el verano pasado con las cuatro familias con derecho a volver al lugar donde nacieron y han transcurrido estos nueve meses sin la entrada de nuevos vecinos. Sólo este mes de enero (el día 3) entró una quinta familia que todavía no cuenta con el contrato de suministros de luz ni agua.

Los inquilinos del corral de la Encarnación pagan unas rentas muy bajas por vivir aquí. Los alquileres oscilan entre los 6 euros mensuales y un máximo de 50 euros, al tratarse en su mayoría de rentas antiguas.

La situación contrasta con la elevada demanda de pisos públicos que hay en la ciudad y con el reproche del gobierno municipal de Sevilla meses atrás a la Junta de Andalucía para que pusiera sus pisos sociales (gestionados por la empresa pública Epsa) a disposición de las familias afecfadas por desalojos.

La Gerencia de Urbanismo que dirige el concejal Maximiliano Vílchez (PP) es la administración que gestiona este corral, que se salvó en su día de la piqueta gracias a la intensa lucha de la asociación Copavetria (en defensa de los patios y corrales de vecinos de Triana) y de las generaciones que nacieron en este patio.

En 1995 fue declarado Lugar de Interés Etnológico por parte de la Junta de Andalucia, luego se rehabilitó y el verano pasado acogió a las primeras familias.

El Ayuntamiento no explica por qué siguen vacías el 61% de las viviendas de este corral trianero ni a qué se debe esta lentitud. A preguntas de este periódico, fuentes de Urbanismo afirmaron este jueves que el ritmo de ocupación de estas viviendas lo marca la entrada de solicitudes de pisos sociales.

"Las nuevas concesiones de vivienda (emergencia social, mayores de 65 o desalojos urbanísticos) se van atendiendo conforme entran la solicitudes, se informan y se aprueban", asegura Urbanismo. La respuesta viene a decir que si no se han ocupado ya estas viviendas sociales es porque no hay demanda social o porque aún no se han aprobado las solicitudes, lo cual es sorprendente.

Las mismas fuentes añaden que "así se ha venido haciendo, de tal modo que recientemente se ha realojado una familia (del programa de mayores de 65 años) por lo que son cinco las viviendas ocupadas y el resto está y sigue disponible para nuevas concesiones".

El Ayuntamiento confirma que todas las viviendas de este corral integran el Parque Social de la Vivienda pública de la ciudad, del que hay alrededor de 30 viviendas aún vacías. Las de este corral trianero representan un 27,5% del total de esa treintena de pisos vacíos del parque social.

¿Cambio de planes? El Grupo Socialista del Ayuntamiento de Sevilla preguntó en noviembre pasado al gobierno municipal de Juan Ignacio Zoido si tenía previsto "un cambio en el proyecto inicial previsto en cuanto a los usos", es decir, si pensaba mantener los locales del corral para el uso común de los vecinos de Triana, tal como así se dispuso en el mandato de Alfredo Sánchez Monteseirín. El gobierno respondió que "carece de información" porque esos locales no los gestiona el parque social de vivienda pública, sino directamente el Ayuntamiento.

El portavoz del PSOE, Juan Espadas, y el concejal Joaquín Díaz plantearon, además, en esa comisión de ruegos si ya estaban ocupados todos los pisos sociales del corral trianero (a lo que se le respondió que sólo cuatro viviendas estaban ocupadas) y por qué seguían sin uso los locales que iban a destinarse al barrio, a lo que se le respondió que el destino de esos locales no dependía del parque social de vivienda. Triana necesita equipamientos.