Paupérrima imagen del Sevilla en Londres, donde saltó ya derrotado, sintiéndose inferior al rival desde el principio y con un once inicial con ocho cambios respecto al equipo titular de Vigo. Trossard y Saka materializaron con sus goles la derrota nervionense y, si embargo, el triunfo del PSV ante el Lens (1-0), que tuvo un palo en el tramo final del choque, le permiten seguir con vida en la Champions e incluso depender de sí mismo. Primero debe recibir al cuadro neerlandés para cerrar la fase de grupos visitando Francia.
Ante el Arsenal no existió el Sevilla, pese a que en la previa Diego Alonso dijo que el Sevilla debía ser fiel a sí mismo. Quizá el técnico no fue fiel a sí mismo y con un once inicial muy renovado, quizá pensando en el derbi, hizo que los suyos se sintieran inferiores desde el inicio.
Martinelli fue un martillo por la izquierda y Saka un puñal por el otro lado. Así llegaron los goles locales, en dos rápidos ataques que culminaron un dominio total del encuentro. En el primer tiempo marcó Trossard a pase de Saka, libre de marca, y ya en la segunda parte Saka sentenció en una jugada personal.
Mariano disparó desde la frontal en el minuto 97 protagonizando el único remate del Sevilla en todo el partido, lo que habla mal de la puesta en escena y desarrollo del encuentro del conjunto de Diego Alonso, que en seis partidos sólo ha ganado al Quintanar.
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