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De la imagen a los datos: esperanzadoras estadísticas del Barcelona - Sevilla

Nyland bloca ante Raphinha, que reclamó un penalti inexistente de Pedrosa antes de su lesión.

Nyland bloca ante Raphinha, que reclamó un penalti inexistente de Pedrosa antes de su lesión. / Enric Fontcuberta / Efe

Una vez más, el Sevilla se vino de vacío de su visita al Barcelona, aunque en esta ocasión la derrota dejó un reguero de buenas sensaciones sobre las que, según los propios protagonistas, el equipo de José Luis Mendilibar debe seguir reforzando su ideario y su modelo de juego.

Las sensaciones las pudo percibir en directo el sevillista que presenció el partido, con variedad de opiniones sobre la realidad de las posibilidades que tuvo el conjunto nervionense de romper su pésima dinámica cuando visita a los tres grandes. Pero los datos sí que aportan luz sobre esa esperanzadora imagen de la que hablan desde Sergio Ramos a Rakitic, desde Joan Jordán a Mendilibar.

Porque el Sevilla, con apenas un 41% de posesión de la pelota frente al 59% del Barcelona, unos datos habituales, sí que atacó muchísimo más que en otras ocasiones frente a este mismo rival, al que se enfrentó por primera vez el equipo blanquirrojo con Mendilibar al frente.

Estadísticas del Barcelona-Sevilla de la Liga 23-24. Estadísticas del Barcelona-Sevilla de la Liga 23-24.

Estadísticas del Barcelona-Sevilla de la Liga 23-24. / Flaschore

50 ataques peligrosos frente a 61

Los datos estadísticos de la web Flaschore.es así lo ratifican. Con apenas ese 41% de posesión, el Sevilla ocasionó 50 ataques peligrosos (de 83 en total) por 61 del Barcelona (del global de 98).

Además, ese medio centenar de ataques peligrosos tuvieron su reflejo en 12 remates, de los cuales tres fueron a portería, frente a los cinco del Barça de 18 remates.

Cuatro paradas de Nyland y tres de Ter Stegen

El volumen de ataques y remates tuvo como resultado que el Sevilla realizó, además de 3 remates a portería, 8 remates fuera y uno rechazado por la defensa del Barcelona, el de Ocampos que sacó Gavi sobre la raya con Ter Stegen ya batido (30'). El Barça, además de los 5 a portería, tiró fuera 5, mientras que la zaga sevillista rechazó 8, un buen dato defensivo, pero que también ilustra sobre cómo acosaron los azulgrana a los blanquirrojos.

El resultado fue que el portero del Sevilla y el del Barcelona intervinieron con paradas decisivas prácticamente lo mismo: 4 paradas del portero noruego por 3 del guardameta alemán. Un dato que por sí mismo habla de la igualdad en cuanto a las llegadas de uno y otro. Eso sí, a Nyland lo libró el larguero en la ocasión de Joao Félix en el minuto 21.  

La sensación de peligro siempre fue mayor en el área sevillista -13 córneres frente a tres, aunque también 16 tiros libres por 12-, donde los centrales realizaron un buen partido y los laterales fueron de menos a más, hasta que el desajuste en el autogol de Sergio Ramos, ya después de los cambios, decantó definitivamente la balanza.

Que el Barça terminara perdiendo tiempo también fue significativo, aunque el resultado fue el mismo de siempre y a los ataques del Sevilla, salvo aquella clarísima ocasión de Ocampos que salvó Gavi, siempre les faltó mordiente y Lukébakio en esta ocasión realizó remates demasiado forzados. 

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