Con el equipo de nuevo en puestos de descenso y ya muchas miradas recelosas en el trabajo del entrenador, el Sevilla puede cerrar este lunes la incorporación de dos refuerzos para la plantilla que se sumen de inmediato al trabajo a las órdenes de Jorge Sampaoli.

Hasta el momento, pese a que los gestores prometieron antes del Mundial que no les temblaría el pulso para las entradas y salidas en el plantel, sólo el defensa francés Loïc Badé, cedido por el Rennes tras su fallida aventura en el Nottingham Forest, se ha sumado al proyecto en este mercado de invierno en el que han salido Isco, Dolberg y el canterano José Ángel Carmona.

El regreso de Lucas Ocampos es uno de los secretos a voces que se escuchan desde hace tiempo en Nervión y la operación está a punto de cerrarse. El jugador no tiene más opciones que seguir en el Ajax o jugar en el Sevilla por la reglamentación FIFA que impide que un jugador pueda militar en una misma temporada en más de dos equipos. Tiene aún residencia en Sevilla y desde hace tiempo se deja ver habitualmente en la ciudad y pueblos limítrofes a los que es muy asiduo. Sevilla y Ajax, junto con los agentes del jugador, están dando forma a los últimos detalles de la operación de regreso. Ocampos, tras acordarse un traspaso con el club neerlandés por 20 millones de euros, fue finalmente cedido por 4 con una opción de compra de 16, que evidentemente no se ejecutará.

El otro puesto que puede quedar cerrado este lunes es un central zurdo que cubra la baja de Marcao, que tuvo que pasar por el quirófano y no podrá jugar por lo menos hasta marzo.

El sevillismo espera que el consejo cierre los fichajes prometidos. Por ejemplo, José Castro aseguró el día antes de la Junta de Accionistas en Radio Sevilla que estaban a punto de llegar "tres fichajes" y esa misma tarde aterrizó Badé en San Pablo, pero de los otros dos nada más de supo.

Éstos, un central y el regreso de Ocampos, pueden llegar hoy.