El rendimiento de Daniel Carriço en el Sevilla, en especial en el último mes y medio, ha sido más que satisfactorio. Tanto de central como de medio centro, el portugués ha convencido a todos los estamentos del club, por lo que el consejo ejecutivo de la entidad no ha dudado en asegurarse su continuidad más allá del 30 de junio. Carriço cerró su incorporación al Sevilla en los primeros diez días de julio como cedido con una opción de compra cuyo precio variaba según se hiciera efectiva antes de 2014 o no.

Así, el Sevilla no ha querido esperar y ya ha decidido acometer su fichaje definitivo tras un viaje a Londres en el que, entre otras cosas, ha podido tratar con dirigentes del Reading este asunto. El subdirector general deportivo, Monchi, es el encargado de negociar los detalles de esta operación, si bien la mayor parte de los mismos ya estaban redactados y firmados. Sin Del Nido ya en el club y sin un hombre aún del perfil de un director general como José María Cruz en el consejo, el de San Fernando es el hombre fuerte en asuntos de negociación con los clubes. Monchi se adelantó a las fiestas y viajó a la capital del Reino Unido, donde podría haber tratado de avanzar en este asunto que aún no ha quedado cerrado, aunque las líneas maestras están trazadas. El Sevilla tiene hasta el 31 de diciembre para comunicar al Reading que va a hacer efectiva esta opción de compra. Una vez hecho eso, el club deberá ajustarse a un calendario de pago.

Las ventajas que obtiene el Sevilla adelantándose en esta operación es el ahorro de aproximadamente el 20% del coste de la opción de compra, que quedó estipulada en 1,5 millones de euros si club de Nervión lo abonaba antes del 31 de diciembre. El derecho preferente por el pase de Carriço seguía vigente para el Sevilla hasta junio de 2014, aunque a un precio de 1,8 millones de euros. El futbolista, por tanto, será jugador blanco a todos los efectos hasta 2018, es decir, cuatro tempororadas más, como quedó todo pactado el pasado verano. Aunque aún no lo ha hecho de manera oficial, lo más seguro es que el Sevilla opte por esta ejecución anticipada de la opción de compra por la que se ahorrará al menos 300.000 euros.

Carriço, por juventud y por prestaciones, era uno de los objetivos de Monchi desde hace un par de años, por lo que lo que ha hecho en estos primeros meses de cesión ha sido confirmar lo esperado. Su polivalencia y su inteligencia táctica en el campo han sido virtudes que le han valido para convertirse en una pieza clave en el esquema de Unai Emery.

Monchi afrontará a la vuelta de las vacaciones nuevos frentes abiertos en materia de negociación. La más difícil será la renovación de Rakitic, un asunto que se perfila cada vez más espinoso viendo el nivel de los clubes que se están interesando en él. La mayor baza que tiene el Sevilla es lo a gusto que se encuentra el suizo-croata en la ciudad, para lo que ha sido fundamental la integración junto a la familia de su mujer. No obstante, el futbolista y su representante, su hermano, son conscientes del momento que vive en el fútbol internacional, a seis meses de jugar un Mundial, y la situación que tiene en el mercado al quedar libre en 2015. El futuro de Cala es otro de los aspectos que debe decidir Monchi. El jugador tiene una promesa de Del Nido y el subdirector deportivo ha confesado que en enero abordará el asunto.