Cultura

'A l'Espagnole', un encuentro galante

  • La compañía de danza contemporánea de Antonio Ruz y la Accademia del Piacere dialogan el sábado en el Femás

Primero fue la ilusión, el atrevimiento. Más tarde, embarcados ya en el proyecto, tras muchos encuentros entre Fahmi Alqhai y Antonio Ruz, el estudio de las fuentes, la selección de las músicas, el rigor, el entrenamiento, los ensayos y los descubrimientos. Por fin, en este apasionante proceso aún sin cerrar, aparece À l'espagnole. Fantasía escénica, un espectáculo que se presenta mañana a las 20:30 en el Teatro Alameda, como primicia absoluta, dentro del 32º Festival de Música Antigua de Sevilla. Sus protagonistas son la formación de música barroca Accademia del Piacere y la compañía de danza contemporánea de Antonio Ruz. Para los músicos, capitaneados por el violagambista Fahmi Alqhai (director del Femás desde hace ocho años) supone la apertura a un nuevo diálogo, tras su aplaudida aventura flamenca con Arcángel Las idas y las vueltas.

Para el cordobés Antonio Ruz, bailarín, coreógrafo y actor, entre otras de la prestigiosa compañía alemana Sasha Waltz y, desde 2009, con compañía propia , "es la realización de un sueño que yo tenía guardado desde hace al menos diez años, cuando vivía en Francia y tuve ocasión de conocer estas maravillosas músicas à l'espagnole. "Años más tarde -continúa el coreógrafo- vine al Femás con el espectáculo Libera Me! (junto al Vocalconsort Berlín) y tuve mi primer encuentro con Fahmi; y como los dos somos inquietos, nos lanzamos inmediatamente a hurgar en ese mundo tenebroso de la corte francesa barroca, con sus candelabros y sus afeites, en el que, de repente, irrumpe la música española de la zarabanda, la chacona, el canario, etcétera".

"Una música española -apunta Alqhai- que alcanza su mayor relevancia tras su paso por América; cuando se convierte en una música bastarda, en un puro mestizaje. Es entonces cuando Europa se fija en España y en su música".

En À l'espagnole. Fantasía escénica, la Accademia (Fahmi y Rami Aqhai, Rodney Prada, Johanne Rose, Enrique Solinis, Javier Núñez, Pedro Estevan y la soprano Mariví Blasco) interpreta un programa serio y de gran altura musical. "No consideramos necesaria la fantasía -afirma Alqhai, también director musical del espectáculo- porque hay muchos colores musicales en este itinerario francés-español (con piezas de Boesset, Luis de Briceño, Lully y Marin Marais entre otros), que termina con la visión de un alemán como Telemann".

La danza, sin embargo, como reza en el título, es una pura fantasía si bien, conociendo el modo de trabajar de Ruz, se sabe que nada será dejado al azar. Con seis magníficos bailarines (Melania Olcina, Lucía Bernardo, Tamako Akiyama -solista durante 14 años de la Compañía Nacional de Danza, a la que también perteneció Antonio Ruz-, Jordi Vilaseca, Manuel Martín e Indalecio Segura), vestidos por Daniela Presta con un vestuario nada barroco, inspirado en la primera etapa parisina de Balenciaga, Ruz ha trabajado en completa libertad. "He leído mucho para conocer el contexto histórico y social, incluida la literatura antihispánica del momento y las censuras surgidas en España por la procacidad de algunas danzas. El espectáculo está lleno de guiños a ellas, pero para el movimiento, salvo la colaboración de Estévez y Paños (que han coreografiado la pieza de Lully), he partido de conceptos puramente abstractos: la copia, el viaje, la frontera, la seducción y el rechazo… Me interesaban mucho esos encuentros y desencuentros que se han producido entre Francia y España a lo largo de toda su historia", aclara.

Para unir los tres mundos, el de la música, el del movimiento y el de la palabra, el Ruz director de escena, con la complicidad siempre creativa de la iluminadora Olga García, ha contado con dos puentes esenciales. Por un lado, la voz y la presencia de Mariví Blasco y, por el otro, con un original maestro de ceremonias o "charlatán", un personaje cercano al bufón, muy común en las comedias-ballet del barroco francés, que aquí interpreta el bailarín almeriense Indalecio Segura. Demasiados activos para perderse este espectáculo cuya siguiente etapa será el Festival de Música y Danza de Granada el próximo 25 de junio, antes de comenzar un largo y siempre enriquecedor periplo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios