Sevilla

Monteseirín logra el respaldo del 60% del PSOE en la capital

  • Los críticos vencen en siete de las 11 agrupaciones socialistas, incluida la de la Macarena, donde los 'vieristas' ni siquiera lograron presentar una candidatura

En la Macarena, anoche, no hubo asalto final, pero sí proclamación de vencedores. La última agrupación del PSOE en celebrar asamblea en la capital, y que se presuponía como la batalla decisiva de una contienda entre las dos secciones del PSOE de Sevilla, la crítica -auspiciada por el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín-, y la oficialista -encabezada por el secretario provincial del PSOE, José Antonio Viera-, acabó con una fácil victoria de los renovadores motivada por la renuncia de los vieristas a presentar candidatura.

Después de la comisión gestora impuesta forzada por la ejecutiva provincial y después de la resolución del Federal para expedientar y proponer la expulsión del partido de siete militantes por presuntas irregularidades en el censo -entre ellos el ex secretario de la agrupación, Manuel Gómez-Lobo-, Macarena continúa bajo el control de quienes respaldan a Monteseirín, en este caso a través de la única candidatura presentada ayer y encabezada por Manuel Enrique Llorente, director general de Hacienda del Ayuntamiento.

Con Macarena, los críticos alineados con Monteseirín dominan siete agrupaciones territoriales -Macarena, Cerro-Amate, Bellavista, Sur, Nervión, Miraflores y Pino Montano- frente a las cuatro que controla Viera desde el provincial -Triana, Centro, Este-Torreblanca y San Jerónimo-. Traducido en militancia, el reparto queda 60 a 40 a favor de los críticos, prácticamente la misma foto existente antes de este proceso asambleario con una sola variación: el cambio de rol de Bellavista y San Jerónimo, agrupaciones que ahora cambian de bando, respectivamente.

Siete meses después de la aplastante victoria de Viera en el congreso provincial -en el que la corriente renovadora liderada por Demetrio Pérez no pudo presentar candidatura por falta de avales-, los críticos devuelven el golpe. La controvertida agrupación Macarena, salpicada en anteriores mandatos por los escándalos de las facturas falsas y el caso Unidad, ha sido el escenario en el que los oficialistas no han podido materializar candidatura para ocupar la cúpula directiva. Se trata de la única renuncia en las once agrupaciones socialistas de la capital, pese a las negociaciones internas que barajaban una terna de nombres, entre ellos el de un antiguo adversario de Monteseirín, Carmelo Gómez, el concejal que el regidor expulsó del gobierno local por perder su confianza en él. Dicen que la secretaria de Organización del PSOE, Susana Díaz, no ha logrado convercerle pese a haberlo repescado para la política al integrarlo en la ejecutiva provincial. Y es que las cuentas, apuntan fuentes consultadas, no les salían a Carmelo. El mutismo con que el provincial ha encarado la asamblea de Macarena denotaba la existencia de debate interno, y ello pese al anuncio de que desvelarían su candidatura justo tras la constitución de la mesa electoral.

La movilización de la militancia en la Macarena ha sido clave, como también lo fue en las otras dos agrupaciones de la capital donde los oficialistas forzaron a través de la ejecutiva provincial la constitución de comisiones gestoras, Bellavista y Pino Montano, y que a la postre han continuado por respaldar la corriente crítica.

Unos 400 militantes se citaron anoche en el número 16 de la calle Monederos. Manuel Gómez Lobo, uno de los expedientados, recibía abrazos y felicitaciones. "¿Que si voy a votar? Me tienen que matar para que no lo haga", respondía, pese a haber renunciado "voluntariamente" a participar en la candidatura por mor del expediente abierto por el Federal. La presidenta de la comisión gestora, Verónica Pérez, constituyó la mesa y aplacó las primeras tensiones de una sesión en la que un militante le exigió explicaciones por la disolución de la anterior cúpula directiva. En los cinco minutos dados de plazo para la presentación de candidaturas sólo quedó formalizada la de Llorente. El anuncio fue recibido con aplausos. Y con una hilera de militantes en cola ante las urnas.

El nuevo secretario de la Macarena espetó anoche que la renovación de la dirección "cierra cualquier duda y sospecha que alguien tuviera de esta agrupación, que reniega de su mala prensa".

Monteseirín suma ya dos avales: el de Chaves -que le llegó en forma de regalo de Navidad- y el de la militancia, al menos en la capital.

310

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios