No podrán tomar decisiones relevantes en los días que aún permanezcan en los cargos. El nuevo alcalde ha atado de manos a los principales responsables ejecutivos de las empresas municipales mediante una orden remitida ayer mismo a los secretarios de los correspondientes consejos de administración. Juan Ignacio Zoido insta a los consejeros delegados y a otros altos directivos a que se "abstengan" de tomar decisiones de peso que influyan en el "tráfico" y en el "giro" de la empresa "sin antes ponerlo en conocimiento" de la Alcaldía. Zoido ya adelantó a Diario de Sevilla que su intención es, en principio, la de presidir todas las empresas municipales sin percibir dieta alguna por la asistencia a los consejos. En la misma carta se alude a la futura constitución de la nuevas juntas generales de cada empresa municipal, en cuyo seno se efectuarán los nombramientos de los componentes de los nuevos consejos de administración. La orden ha sido recibida por Tussam, Emvisesa, Lipasam, Emasesa, Sevilla Global y De Sevilla Digital (ésta última que regenta la televisión municipal).

Ayer también trascendieron las primeras sorpresas con las que se ha topado el nuevo gobierno. Se trata de desvíos millonarios en obras en las que están directamente vinculadas algunas de las empresas municipales, como son los casos de Emasesa y Emvisesa. Zoido está pendiente de una auditoría general que informe sobre el estado real de las arcas municipales y de todas las entidades públicas que dependen del Ayuntamiento. En una entrevista concedida anoche a Giralda Televisión, emisora municipal, el nuevo alcalde reconoció -sin mayores detalles ni precisiones- que su gobierno se encontrará con determinadas sorpresas en la gestión de obras clave como la ampliación de Fibes y el paso subterráneo de Bueno Monreal. Estas irregularidades estarían motivadas, según los casos, por informes contrarios de los altos funcionarios municipales o por importantes desvíos presupuestarios. El alcalde se mostró partidario de dar a conocer todos estos detalles en cuanto se disponga de la información al completo, al mismo tiempo que dejó claro que la ciudad saldrá adelante de cualquier atolladero por importante que sea.

Zoido dedicó su primera jornada laboral como alcalde a emitir esta orden y a firmar los decretos de constitución de la nueva junta de gobierno de la ciudad y dar carta de oficialidad a la nueva estructura de gobierno con las siete áreas ya conocidas. En la misma entrevista a la emisora municipal, el alcalde destacó que también dedicó varias horas de su primera jornada al contacto con los vecinos: "Jamás perderé el contacto con la calle, porque en la calle es donde se perciben los problemas de forma real". Insistió en su discurso de "defensa de los intereses generales de los sevillanos" por encima de los del partido: "Llevo grabada a fuego la lealtad con los sevillanos. No defiendo ni la personalidad ni la identidad de Zoido, sino la de los sevillanos".

Zoido defendió su condición pública de católico. El sábado juró su nuevo cargo con una mano sobre la Biblia. "Yo no soy producto de ningún marketing. Yo me manifiesto como soy. Soy cristiano y soy católico. Respeto a todo aquel que no lo sea. Yo me he criado en esos valores y estoy muy orgulloso". Ayer mismo, el secretario general del PSOE de Sevilla, José Antonio Viera, criticó en una comparecencia pública que el nuevo alcalde de la ciudad se haya "encomendado a las autoridades del cielo" para solucionar problemas de tanta gravedad como el desempleo. Viera aludió en varias ocasiones a las "autoridades del cielo de Zoido" y le puso varios ejemplos de lo que tenía que hacer antes que esperar una concesión o ayuda divina.

Zoido se comprometió ayer a facilitar toda la información de los asuntos municipales a los grupos de la oposición, por lo que anulará la polémica circular emitida por Monteseirín que reducía sustancialmente la información disponible para estos grupos políticos. Tuvo ocasión de referirse al líder municipal de IU-CA, Antonio Rodrigo Torrijos: "Tenemos poco en común él y yo. Yo respeto mucho al adversario político y, por supuesto, a quienes han votado al adversario. Pero parece que el señor Torrijos no tiene el mismo respeto que yo por los votantes de otros partidos", en referencia al discurso del portavoz de IU en el pasado Pleno.

Aseguró el nuevo alcalde -respaldado por más de 166.000 votos- que la humildad será la seña de gobierno de sus concejales: "Voy a tener humildad, la misma que le he pedido a los concejales de mi gobierno". No quiso entrar en valoraciones personales sobre Alfredo Sánchez Monteseirín, por quien mostró su respeto personal y de quien dijo que le hubiera gustado que estuviera en la toma de posesión de la nueva Corporación municipal. Quiere que se le recuerde tras su paso por la Alcaldía como a un sevillano que trabajó con "ilusión" por su ciudad. Aseguró que no cambiaría el cargo de alcalde de Sevilla por ningún Ministerio que le pudiera ofrecer Mariano Rajoy si el PP se hace con la Moncloa en las próximas elecciones generales: "Ni iba aceptar un Ministerio, ni Mariano me lo ofrecería".

Poco a poco van trascendiendo los primeros nombramientos del nuevo organigrama municipal sin comunicaciones oficiales. Diario de Sevilla avanzó a mediodía de ayer en su edición digital que el empresario Antonio Castaño será el nuevo director gerente del Consorcio de Turismo de Sevilla, y Rafael Rivas Prieto, oficial de la junta de gobierno de la Hermandad del Gran Poder, el nuevo director de Fiestas Mayores. Ambos estarán bajo la dirección política del concejal Gregorio Serrano, que tiene además encomendadas las delegaciones de Empleo y Economía.