Darle toda la responsabilidad del triunfo del Sevilla en Las Palmas a Sergio Rico sería tan exagerado como otorgársela a Iborra o a Correa. Sin embargo, es una convención futbolística hablar de porteros que salvan puntos para calibrar su rendimiento en similar medida que delanteros o mediocampistas que decantan partidos con sus asistencias o sus goles. En virtud de esa convención, hay que reconocer que el meta realizó un partido completísimo, y que permitió al Sevilla no sólo mantenerse vivo hasta el gol de Correa, sino sostener la renta con otro paradón a David Simón dos minutos después.

No fue la primera intervención clave del meta sevillista ante el equipo de Quique Setién. En similar medida a las oportunidades que tuvo el Sevilla, Sergio Rico realizó cuatro o cinco intervenciones de más o menos mérito. Alguna de ella espectacular, como el despeje a cabezazo cruzado de Boateng en el minuto 59. O menos vistosa e igual de trascendente, como el mano a mano con Jesé en el minuto 6. U otra parada a David Simón, saliendo valentísimo, como un portero de balonmano.

Sergio está creciendo a pasos agigantados; apareció de manera magistral, con aplomo"

Igualmente, no es la primera vez en lo que va de curso que Sergio Rico realiza intervenciones claves y trascendentales, en momentos cruciales de los partidos. Por ejemplo, es muy recordado el paradón que le hizo a Gayá en el minuto 94 prácticamente, a bocajarro. Sergio Rico incluso hubo de consolar tras el pitido al lateral valenciano, que habría dado un punto salvador a su equipo, sobre todo en lo tocante a lo moral, y le habría restado dos al Sevilla (1-0).

Tan decisivo como ante el Valencia fue en la segunda jornada en El Madrigal, donde realizó varias paradas de mucho mérito a disparos de los atacantes del Villarreal. A Trigueros le sacó un par de tiros con veneno. Eso fue poco antes de otro partido clave en Turín en la Champions. Más recientemente fue muy llamativa la parada a un cabezazo cruzado de Iago Aspas en el Celta-Sevilla, y otra intervención a un tiro con marchamo de gol de Wass. Si se sumasen todos esos puntos, incluidos los tres de Las Palmas, alcanzarían la cifra de 9. Quizá sea exagerado contabilizar su rendimiento así, pero la conclusión es que Sergio Rico está sumando, y mucho.