Hace muchas semanas que el problema de los cortes de luz en Espartinas por los "enganches ilegales" circula y es objeto de comentario por las redes sociales. Pero nada tiene que ver lo que está ocurriendo en el municipio -uno de los que tienen la mayor renta per cápita de Sevilla y Andalucía- con esos otros enganches que han proliferado por toda Andalucía protagonizados por particulares.

En esta ocasión, es un enganche del Ayuntamiento y afecta a toda una urbanización, Olivar del Fraile, que está sin luz desde hace semanas en sus calles: Perú, Colombia, Antonio García Barbeito y Adolfo Suárez. En las viviendas el suministro sí llega con normalidad. Son 142 casas, con más de 700 personas afectadas y muchos niños, en una zona que se ubica a la entrada del municipio y frente a un gran descampado. Les cortaron la luz de las farolas a mediados de diciembre, porque la acometida y el enganche que les conectaba a la red no estaban legalizados ni cumplían los requisitos de Endesa, pese a que el barrio fue recepcionado en 2007.

La situación era conocida en el Consistorio desde hace una década, según el gobierno local de C's. La comunidad de propietarios denuncia la falta de luz en la calle en la que se desarrolla ahora el día a día de los vecinos y la falta de respuesta oficial sobre cuándo se normalizará todo. Preocupa que la situación económica del Consistorio y la interinidad del gobierno hagan que el problema se prolongue en el tiempo, cuando se trata de unas viviendas recepcionadas y cuyos propietarios pagan impuestos, pese a que carecen ahora de uno de los servicios esenciales que debe prestar un municipio.

Algunos afectados sí se han reunido con miembros del gobierno local y con el edil de Urbanismo, Ángel Mayo (C's). Éste explicó ayer que se trata de una situación irregular que viene de la gestión del anterior gobierno local del PP, que recepcionó la urbanización sin que el enganche tuviera los informes técnicos y el visto bueno de Endesa. Asegura que el suministro se ha estado haciendo en estos años "con unas condiciones de seguridad bastante malas; ha habido riesgo para las personas importante", de ahí que tomara, de acuerdo con el equipo de gobierno C's, la decisión de cortarlo en diciembre. En julio, Endesa se puso en contacto con el Ayuntamiento, reclamando 6.200 euros por ese enganche irregular.

Mayo afirma que ya se están realizando los trabajos para regularizarlo todo. Las obras supondrán un coste para el Consistorio de entre 17.000 y 18.000 euros, más la multa que haya que pagar por la situación. Calcula que la parte técnica estará terminada en unas tres semanas, aunque es Endesa la que debe autorizar el suministro, algo para lo que el edil no es capaz de poner fecha. Los vecinos habrán pasado, como mínimo, dos meses sin alumbrado público.

Olivar del Fraile no es la única zona que ha sufrido cortes de luz en los últimos meses. También se han producido en Los Barreros y Pepe Méndez, en algunos casos, y según Mayo, como medida de presión de Endesa para que el Ayuntamiento pague facturas pendientes que quiere analizar y negociar antes. Mayo insiste en que es una situación heredada y asegura incluso que la empresa que se encarga de la gestión integral del alumbrado, SICE sólo es responsable del 60% del casco urbano.