Diecisiete personas fueron detenidas ayer en Málaga por su presunta pertenencia a una banda criminal irlandesa dedicada al blanqueo, el tráfico de drogas y de armas que se había asentado en la Costa del Sol y que constituía una de las principales redes del crimen organizado internacional. Otras 14 fueron apresadas en el Reino Unido e Irlanda, en una operación conjunta en la que han participado unos 750 policías y en la que se llevaron a cabo 122 registros en Inglaterra, Irlanda y España.

Según la Policía Nacional, el dinero obtenido de forma ilícita por la red se invertía luego en el sector inmobiliario, tanto de la Costa del Sol como de otros países, como Brasil en donde poseían seis complejos turísticos de lujo. Los investigadores encontraron "indicios determinantes" de blanqueo de capitales tras analizar un entramado de más de 200 sociedades mercantiles. El grupo criminal tenía una cantidad tan "ingente" de beneficios que incluso había comenzado a introducirse en otros mercados como energías renovables, comodities, infraestructuras, reciclaje, telecomunicaciones logística y actividades lúdicas. "El entramado empresarial urdido por la organización tenía ramificaciones en cerca de una veintena de países", indicó la Policía.

Además de las detenciones, en España se bloquearon 60 propiedades de lujo -sobre todo en la Costa del Sol-, cuentas y productos bancarios. También se intervinieron una treintena de vehículos de alta gama, armas cortas y abundante documentación.

La desarticulación de la red ha supuesto casi dos años de trabajo. Todo comenzó cuando los investigadores vincularon un asesinato cometido en Estepona en 2008 con algunos miembros de la organización. Incluso, se les relacionó con otros crímenes perpetrados en la Costa del Sol, Holanda e Irlanda.

"Al frente de la red mafiosa se encontraría, presuntamente, una familia irlandesa que lideraría una de las organizaciones criminales de mayor peso a escala internacional, principalmente en el Reino Unido e Irlanda", indicó ayer la Dirección General de Policía (DGP). Sus capos mantenían "un control absoluto" sobre el mundo delincuencial irlandés y estaban relacionados con cabecillas de las principales bandas del Reino Unido. La importancia del golpe policial se desprende de la información facilitada por la DGP en la que se detalla que los responsables de la banda "durante varios años lideraron el tráfico de drogas en Holanda y en España han manifestado una autoridad relevante sobre las mafias asentadas en la Costa del Sol".

En Málaga fue arrestado el presunto cabecilla de la red, Christopher Kinahan, un irlandés de 53 años, que al parecer dirigía la organización desde la Costa del Sol. También fueron detenidos sus hijos Daniel y Chirstopher Junior. Los apresados en las localidades de Fuengirola, Marbella y Estepona fueron trasladados a comisarías de la capital y de la Costa del Sol para mantenerlos aislados. Está previsto que hoy o mañana pasen a disposición judicial.

La investigación no ha sido fácil. No sólo por la "compleja estructura mercantil" que habían montado, sino por al amplio dispositivo policial que tuvo que desplegarse. De hecho, en julio de 2008 se llevó a cabo una reunión en la ciudad holandesa de La Haya bajo el amparo de Europol, en la que participaron delegaciones policiales de España, Bélgica, Holanda, Irlanda y Reino Unido. Aquel encuentro fue el punto de partida de un trabajo en común que permitió ayer la desarticulación de la red.

La banda blanqueaba el dinero procedente de sus actividades delictivas a través de empresas de importación y exportación en Irlanda, Reino Unido y España. La red ha estado ofreciendo un servicio de inversión internacional, introduciendo ciento de millones de libras de dinero negro en cuentas, empresas y propiedades. Por ello, ya se está realizando la correspondiente investigación financiera. Los detenidos son en su mayoría irlandeses y británicos, pero también hay cuatro abogados españoles.

La operación fue coordinada desde Madrid, aunque contó con el apoyo de un importante número de policías de Málaga. Participaron agentes de la Udyco, la UDEF, los GEO y la UIP, entre otras.