La polémica sobre la llegada de inmigrantes en un vuelo a Granada siguió ayer coleando. La cuestión ha sobrepasado los límites de la disputa local para convertirse en un tema central de la política nacional estos días, hasta el punto de que habrá cambios en materia de devolución de inmigrantes a terceros países según informó ayer el Ministerio del Interior.

El departamento que gestiona Fernando Grande-Marlaska confía en recuperar "a corto plazo" la capacidad plena de la devolución de los inmigrantes a sus países de origen, una cuestión que ahora mismo no se puede hacer debido al cierre de las fronteras. Por otra parte, el Ministerio incidió en que "ni organiza ni gestiona" los traslados de las personas que acceden a España de forma irregular y que tienen derecho al sistema de acogida por razones humanitarias.

El Ministerio está pendiente de recuperar "plenamente a corto plazo" su capacidad de devolución de inmigrantes después de "semanas" de gestiones con países africanos a los que les ha afectado el cierre de fronteras por la pandemia del Covid-19. Estas devoluciones se han visto mermadas por la pandemia, aunque sí se han fletado algunos vuelos.

Interior explica que espera recuperar su capacidad plena en unas devoluciones que se programan para aquellas personas que no son acreedoras de protección internacional, a la vez que se da la debida protección a las personas vulnerables. "Todas las devoluciones se hacen de acuerdo con la legislación española e internacional y con escrupuloso respeto a los derechos humanos", subrayan.

Esto ha sido posible, según Interior, gracias a las relaciones de confianza que el Gobierno ha ido tejiendo desde hace dos años y medios con los países de origen y tránsito de la migración.