Los grupos de la oposición parlamentaria salieron ayer en tromba contra el Gobierno andaluz al cierre de una semana movida en la Cámara. ¿El motivo de sus críticas? La reacción del Ejecutivo, y en particular de la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, después de que el decreto de convalidación para la promoción de 23.000 funcionarios interinos que cosechara el fracaso con el voto en contra del PP y de Podemos y las abstenciones de C's e IU.

El presidente del PP, Juan Manuel Moreno, acusó directamente a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, de presentar un "decreto chapuza para los interinos" que "no tenía ninguna viabilidad, que algunos dudaban de su legalidad". De ahí que su grupo "no apoyara una chapuza". Moreno recalcó que, tras ello, "Díaz se quedó sola".

Durante su intervención en la Convención Provincial del PP de Córdoba, en un auditorio ante más de 500 personas, el presidente de los populares andaluces cargó contra el Gobierno socialista y el partido que lo sostiene, con la "complicidad" de Ciudadanos, por "pisotear las más elementales reglas de la democracia, el estatuto de los andaluces y los derechos legítimos de la oposición".

A juicio de Moreno, "cuando [Díaz] ve que no le salen las cosas actúa con una pataleta en la que le da igual perjudicar a miles de funcionarios interinos y lo hace exclusivamente por una batalla política en la que ha cogido de rehenes a los funcionarios interinos, algo que en el PP no se va a consentir".

Desde las filas de Podemos, los parlamentarios José Luis Serrano y Carmen Lizárraga recalcaron que el Ejecutivo "es incapaz de generar alianzas", haciendo así referencia a que "no ha conseguido ni un sólo voto favorable fuera del grupo parlamentario socialista en relación al Decreto Ley sobre la antigüedad de los interinos". Serrano resaltó que "la Junta ha tardado cuatro años en tratar de adecuar el ordenamiento jurídico a una sentencia comunitaria de no discriminación de los interinos, y lo ha hecho mediante un instrumento legal apropiado sólo para los casos de urgencia y necesidad que impide la aportación de enmiendas y mejoras, puesto que sólo se puede votar sí o no".

Lizárraga acusó al Ejecutivo de "usar de coartada a los interinos para ocultar su falta de costumbre de que exista una pluralidad en el Parlamento, y además, ni siquiera ha conseguido el apoyo rotundo ni absoluto de ninguna de las fuerzas sindicales, que en el mejor de los casos han hablado como si de un mal menor se tratara".

El coordinador regional de IU, Antonio Maíllo, lamentó que Montero emplee "argumentos rastreros" tras su "derrota". El portavoz de IU dijo sentirse "perplejo" por la reacción del Gobierno, ya que la consejera de Hacienda y Administración Pública, a la que tiene por ser "una persona que suele ser seria", ha utilizado "argumentos tan rastreros como vincular la no ratificación o el rechazo de un decreto, que es una chapuza, con la oferta de empleo público, que no tiene nada que ver".