Patrizia Sandretto luce un impresionante collar de inspiración hispanoamericana en su presentación en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC). El collar "es de bisutería" -aclara su dueña- pero no deja de ser una impresionante obra de arte que podría costar igual que si se tratara de piedras preciosas, del mismo modo que hay bolsos carísimos y firmados por los mejores diseñadores elaborados con piel vegana. El collar es también un guiño de esta mecenas afable, desprejuiciada y generosa a los vínculos americanos del antiguo monasterio de la Cartuja y una muestra de su poderío escénico, que la iguala a coleccionistas tan célebres como Peggy Guggenheim o, en nuestro contexto, Elena Foster Ochoa. Sandretto está considerada desde hace ahora 30 años como una de las coleccionistas de arte contemporáneo más importantes de Europa, vive en Turín en una mansión que perteneció a la familia de Carla Bruni -la saga burguesa de los Bruni-Tedeschi- y quiere que la colección Sandretto Re Rebaudengo que ostenta su familia estreche lazos con Andalucía para que, como le ocurrió a ella hace ahora tres décadas, muchas personas "puedan cambiar su vida a través del contacto con los artistas y la creación contemporánea".

Con esa voluntad, Sandretto, que conoció España cuando veraneaba de niña con su padre en Cadaqués, y retomó el vínculo gracias a su presencia habitual en la feria ARCO Madrid -ciudad en la que desde 2017 tiene una sede su fundación-, ha aceptado la invitación cursada por la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico para mostrar una parte de sus tesoros artísticos en el CAAC a partir de junio y plantear una alianza público-privada que permita el desembarco de sus valiosos fondos en varias capitales andaluzas a través de exposiciones, programas didácticos y curatoriales.

La mecenas con Mar Sánchez Estrella, Juan Antonio Álvarez Reyes y Patricia del Pozo en el CAAC.

Con ella y con Francesca Thyssen-Bornemisza, que ha firmado un acuerdo para vincular su colección y su Fundación TBA21 al C3A de Córdoba por tres años, Andalucía se convierte en uno de los enclaves "más atractivos de España para la inversión cultural", según aseveró la consejera Patricia del Pozo en la presentación de la gran exposición de la colección Sandretto, Extraño, que reunirá a partir del 8 de junio en la Zona Monumental y el Claustrón Norte del antiguo monasterio de la Cartuja un gran número de obras de artistas internacionales de la colección, como Maurizio Cattelan, Anish Kapoor o Damien Hirst, para plantear una visión fuera de lo convencional de la creación contemporánea.

'Bang-Bang Room', 1992, instalación de Paul McCarthy de la colección de Patrizia Sandretto.

La muestra es una coproducción con el Museo Patio Herreriano de Valladolid, cuyo director Javier Hontoria es también comisario junto al del CAAC, Juan Antonio Álvarez Reyes, y sella una alianza estratégica que podría convertir Sevilla en otra sede de esta Fundación Sandretto Re Rebaudengo que intentó, sin éxito, alojarse en la Nave 9 de Matadero Madrid, un empeño cultural de la exalcaldesa Manuela Carmena que ahora podría reactivarse desde Andalucía.

El proyecto de la mecenas turinesa destaca también por su potente compromiso pedagógico, con programas específicos para acercar el arte a personas discapacitadas o con problemas cognitivos, así como por su apoyo a los comisarios del futuro con unas becas que les permiten formarse durante cuatro meses en España o Italia, recorriendo sus principales museos, galerías y colecciones privadas, de modo que al volver a sus países de origen den relieve al arte que han conocido.

'Exercises on Past and Present Memories' de Antoni Muntadas.

Extraño será una de las grandes apuestas de una temporada que incluye también dos exposiciones de media carrera que revelarán los procesos creativos del artista sevillano Rubén Guerrero (del 7 de abril al 11 de septiembre) y de la jiennense Cristina Lucas (a partir del 13 de octubre), así como la presentación de la latinoamericana Gala Porras-Kim o la revisión de una parte de la colección permanente del centro y de sus últimas donaciones y adquisiciones en Pintura pintura. Así, el utrerano Rubén Guerrero desvelará la importancia de los dibujos y las maquetas en el desarrollo de sus obras posteriores en tanto que Cristina Lucas, autora de la popular Alicia instalada en la entrada del CAAC, recorrerá su producción concentrándose en obras que subrayan el vínculo entre el poder y el control del saber.

'S.T.', 2015 de Rubén Guerrero.

La muestra de la colombiana Porras-Kim, que vive y trabaja en Los Ángeles, y cuya obra forma parte de museos como el Whitney de Nueva York y el LACMA, reflexionará a partir del 29 de septiembre sobre los límites de las prácticas del museo y las estrategias del arte contemporáneo. Y en Pintura pintura, que se inaugurará el 15 de diciembre, se reunirán conjuntos de autores como Pérez Villalta, Soledad Sevilla, Gerardo Delgado, Ana Barriga, Juan Suárez o Curro González, así como obras de artistas nacionales e internacionales o donaciones más recientes de galeristas como Juana de Aizpuru y Pepe Cobo.

El año expositivo lo abrirá el 24 de marzo Muntadas: Ejercicios sobre memorias pasadas y presentes, en la que el Premio Velázquez de Artes Plásticas 2009 se inspira en el Galeón de Manila y los intercambios comerciales entre Oriente y Occidente. Pionero de las instalaciones multimedia, Muntadas visitó Filipinas en 2019 e inició una investigación a fondo del pasado de la antigua colonia española que ve la luz en el quinto centenario de la primera circunnavegación.