Las reacciones en el Betis ante lo expuesto en el acta arbitral por Ontanaya López no se han hecho esperar. Y fue el propio protagonista de la acción, el técnico Paco Chaparro, el primero en alzar la voz para desmentir lo escrito por el colegiado castellano-manchego y que podría acarrearle hoy una sanción del Comité de Competición.

“Un corte de mangas es algo que no acostumbro a hacer. Me imagino que lo habrá llamado alguien que lo viera por televisión, porque de los que había allí no lo ha visto nadie. No se pueden hacer estas cosas. Me imagino que habrá sido una mala interpretación por su parte”, afirmó Chaparro, que explicó detalladamente el momento que el árbitro recogió en el acta, ofreciendo una versión completamente diferente: “Él estaba a 40 metros de mí y lo que yo le hago es un gesto tocándome el reloj cuando Edu está viniendo al vestuario, pero las cosas son así. Yo no me he quejado en todo este tiempo de los árbitros con lo que están haciéndonos, pero no puede ser que un árbitro diga eso de un entrenador”.

El propio Chaparro bajó al vestuario arbitral cuando el delegado bético, Salvador Navarro, le informó de lo recogido en el mismo. El técnico quiso decirle de primera mano a Ontanaya López que se estaba equivocando en su apreciación, algo que éste no admitió, al no querer recibir al técnico en su vestuario . Pero el entrenador bético no sólo estuvo acompañado del delegado, sino que el propio Manuel Ruiz de Lopera bajó al vestuario arbitral para pedirle explicaciones, algo que no ha sido recogido en el acta, pero que no sentó bien al colegiado.

“Yo me entero de lo que pasa y voy a hablar con el árbitro, que me dice que eso es lo que se ha visto en las imágenes. Así que las vamos a buscar. Le dije que no era verdad, porque lo que yo le digo es el minuto de tiempo que se comió”, comentó Chaparro, que esperaba la reacción que luego se produjo en el club: “Claro que vamos a recurrir”.

En el Betis se van a presentar alegaciones al acta de Ontanaya López para evitar una sanción al técnico bético, por lo que incluso se va a presentar un vídeo, después de una mañana de intensa búsqueda, donde se recoge el final del encuentro y en el que se aprecia a Chaparro tocándose la muñeca y señalando al reloj. El conjunto bético espera que sea suficiente para desvirtuar la presunción de veracidad del acta y que Chaparro no sea sancionado. Esta tarde se reúne el Comité de Competición, como todos los martes, y deberá tomar una decisión sobre el asunto. En el Betis se mantiene la esperanza en la decisión, pese a los últimos casos donde no se le ha hecho caso.

Los propios ayudantes del entrenador verdiblanco, Juan Merino y Carmelo del Pozo, confirmaron la versión del técnico, algo que les comentó en el propio vestuario tras el partido. “Él nos dice que se señala el reloj, porque pita el final del partido un minuto antes de lo que había indicado el cuarto árbitro, por lo que no entiende el acta arbitral”, comentaron ambos ayudantes.

Pero el técnico verdiblanco también se refirió al inesperado traspié ante el Deportivo, algo que le reafirmó en sus declaraciones de las últimas semanas, donde siempre señaló que el Betis va a sufrir hasta el final. “El objetivo claro es mantenerse a ser posible, aunque sabemos que va a ser difícil por cómo se están desarrollando las cosas”, comentó Chaparro, que confía en que el equipo retome las sensaciones positivas que se vieron ante el Espanyol o durante algún tiempo del partido del sábado: “La culpa de la mejoría la tienen Paco Chaparro, Merino, Del Pozo y por supuesto los jugadores. Todavía estamos en ese cambio que tiene que seguir, y a ver si el resultado del Espanyol durante unos 70 minutos muy buenos, o como contra el Dépor que hubo otros 20, así que se consigue con la colaboración de la gente que está próxima a mí, y con el grandísimo esfuerzo de los jugadores. El mensaje de las canciones lo captaron bien. El equipo estaba en una circunstancia muy parecida a la del año pasado, se hicieron muchas cosas y eso es lo que más ha sonado”.

Por último, el técnico también quiso pronunciarse sobre los incidentes acaecidos antes del encuentro en los alrededores del estadio verdiblanco, para lanzar una llamada a la tranquilidad: “El mensaje que le mando a la afición es que vayan al fútbol a disfrutar, que vayan con la intención de ver un juego y si es posible ver a su equipo ganar. No se puede hacer algo como el altercado que sucedió aquí el otro día. Les pido orden y conciencia porque así no se va a ningún sitio”.