Empezar de cero, la misión de Negredo

El cuerpo técnico trabajará con él desde el inicio para recuperar su mejor versión

Un delantero para el psicoanálisis
Un delantero para el psicoanálisis
Eduardo Florido / Sevilla

01 de julio 2010 - 05:02

El cuerpo técnico del Sevilla en pleno pondrá especial hincapié en recuperar la mejor versión de un jugador que tuvo un bajón de rendimiento casi incomprensible el curso pasado: Álvaro Negredo. El futbolista incluso despertó animadversión en un sector de la afición y Antonio Álvarez es consciente de que, dadas las enormes cualidades de un jugador tan joven, debe darle la vuelta a esta realidad. El jueves que viene Negredo se reincorporará a la disciplina del Sevilla para realizar los pertinentes reconocimientos médicos. Y desde ese mismo momento comenzará su particular misión especial: empezar de cero y volver a ser el delantero que tanto ilusionó y que debutó con la selección absoluta.

Tras un inicio de Liga espectacular, con goles, asistencias y un gran despliegue físico y táctico en el campo, Negredo se fue diluyendo al tiempo que fue empeorando su relación con Jiménez, por la continua exigencia del ex técnico sevillista. Pero lo más extraño es que la llegada de Álvarez no cambió un ápice su rendimiento. El cuerpo técnico del Sevilla lo achaca a un problema anímico que redundó en sus prestaciones, pues ni siquiera en la final de Copa, tras su decepcionante partido en Almería -donde ya debió estar especialmente motivado y le salió todo al revés- dio síntomas de mejoría. El propio Álvarez reconocía a este diario en una entrevista que será uno de sus objetivos: "Tengo mucha confianza en recuperar a Negredo, seguro", decía antes de explicar el por qué de su situación. "Llegó en buena dinámica, metió goles, fue a la selección, y después fue apagándose, no sé si por la responsabilidad. Ha sido un tema psicológico".

En ese sentido, el regreso del psicólogo Miguel Ángel Gómez, tras su faceta de entrenador, a la secretaría técnica por expreso deseo de Monchi va encaminada precisamente a ayudar desde su parcela a mejorar el rendimiento de futbolistas con una motivación irregular. Gómez trató asuntos peliagudos como los vaivenes de Luis Fabiano cuando no se sentía protagonista o el tratamiento a Jesús Navas en aquella ya olvidada etapa en que no soportaba las concentraciones.

En Nervión son conscientes de que los jugadores están sometidos a los bajones anímicos de cualquier mortal. Casos como los de Romaric, de quien Del Nido ha dicho que permanecerá gracias a su autocrítica, o Konko son susceptibles de verse reconducidos con la aportación de Gómez. Y Negredo, también. A sus 23 años, ha de volver a ser ese delantero capaz de golear y de abrir nuevas vías de ataque. Álvarez lo sabe, confía en él y así se lo transmitirá durante la primera pretemporada que hará como sevillista, algo que también ha de beneficiarle muchísimo.

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