A tenor de sus últimas declaraciones, parece que a Giovani dos Santos parece incomodarle la situación en la que se encuentra, de ahí que se haya empecinado en resolver su futuro de la manera más rápida posible. Para ello, el futbolista del Tottenham cogió un vuelo nada más concluir el partido amistoso que enfrentó a las selecciones de Estados Unidos y México la madrugada del miércoles al jueves, llegando a Londres la pasada madrugada, con la esperanza de tener una reunión con los dirigentes del Tottenham a lo largo del día de hoy para desbloquear la situación.

"Mi vuelo parte de aquí a Londres; no sé muy bien qué pasará con mi futuro, sigo esperando noticias lo antes posible; yo escucho lo que dice el representante, espero que me digan que ya está hecho porque no quiero que se demore más", indicaba el futbolista en unas declaraciones recogidas por el diario mexicano Récord, en el que volvió a señalar su preferencia por volver al fútbol español.

Mientras en su país natal se da por cerrada su cesión al Sevilla, con una opción de compra de dos millones de euros y un contrato por cuatro temporadas, lo cierto es que la negociación se encuentra prácticamente en el mismo punto que al comienzo de las conversaciones. El Sevilla sólo quiere afrontar una cesión con opción de compra, mientras que el conjunto londinense quiere desvincularse del futbolista de manera definitiva. Ahí entra en juego la preferencia de Giovani de jugar a las órdenes de Marcelino, y el factor tiempo, que a medida que pasa parece fortalecer la postura del Sevilla.

Pero el tiempo también juega en contra de Giovani. Tras disputar la Copa de Oro y la Copa América, el futbolista mexicano no ha hecho ningún tipo de pretemporada, algo que le pasó factura en el choque ante Estados Unidos, en el que sólo disputó media hora tras reconocer que no estaba físicamente en condiciones para jugar desde el inicio. De esta situación se deducen las prisas de Giovani por resolver su futuro, ya que es probable que entrene apartado de sus compañeros en el Tottenham, por lo que cada día que pasa provoca que su integración en el Sevilla, en caso de consumarse la cesión, se retrase y su desventaja con el resto de sus compañeros, mayor.

Sin embargo, el nerviosismo que parece haberse apoderado del futbolista contrasta con la tranquilidad que el Sevilla desprende desde el primer momento de la negociación. El club, con la plantilla cerrada a falta del refuerzo en ataque, se siente con la comodidad de tener los deberes muy adelantados y con la seguridad de que el Tottenham terminará cediendo, por lo que el supuesto interés de Villarreal y Udinese en Giovani no inquieta en absoluto en las oficinas de Nervión.

Además, el Sevilla también tiene bastante adelantada la salida que se produciría con la llegada de Giovani, ya que las ofertas por Rodri, que parece el señalado para marcharse en caso de que llegara el ex barcelonista, no son pocas precisamente, y alguna de las mismas se encuentran bastante avanzadas.

Pero a pesar de esa tranquilidad que irradia el Sevilla, las prisas del futbolista pueden hacer que todo se acelere en un sentido o en otro. En este caso sólo habría dos opciones: que el Tottenham acepte la cesión o que el jugador elija marcharse a otro club, ya que el Sevilla no está dispuesto a hacer frente a un traspaso en ninguno de los casos.