El Sevilla va a luchar con todas sus fuerzas por que Maresca no cumpla toda la sanción impuesta por el Comité de Competición y ratificada por el de Apelación. A los servicios jurídicos del club les ha molestado muchísimo que este último ni siquiera se detuviera a analizar ni a replicar las alegaciones presentadas y por ello mismo van a presentar un recurso estudiado al detalle al Comité Español de Disciplina Deportiva.

El Sevilla confía más en los juristas del CEDD, dependiente del Consejo Superior de Deportes, que en los de la RFEF. El consejero Óscar Cisneros destaca que sólo espera un trato jurídico a las tres alegaciones presentadas: el arrepentimiento espontáneo, la provocación suficiente y la ausencia de antecedentes en el jugador. "Es que en Apelación ni siquiera leyeron las alegaciones y ahora lo que vamos a hacer es reproducirlas, sabiendo que es un recurso complicado. Tomamos la decisión de no presentarlo hoy -el CEDD se reunió ayer- con la idea de hacerlo más adelante de forma más profunda y detallada". "Además -añade Cisneros-, tomaron como reincidencia que había visto dos tarjetas amarillas, y eso es como si toman como antecedentes penales para un delito el haber tenido dos sentencias en contra por juicios de falta".

El problema que se encuentra el jugador y que quiere paliar el servicio jurídico del club es que Competición aplicó el artículo 122.f) del Estatuto de la RFEF, referido a infracciones graves castigadas con suspensiones de cuatro a doce partidos. Y a Maresca le cayó el mínimo de ese artículo, cuatro. El Sevilla tratará de que se aplique el artículo 137.h), cuyo castigo va de uno a tres partidos, o que al menos las alegaciones presentadas siguiendo una depurada técnica jurídica sirva para reducir la sanción de cuatro a dos partidos, al menos. "No vamos a pedir la suspensión cautelar, sólo queremos reducir la sanción y acabar con esta sensación de indefensión que hemos tenido hasta ahora", dice Cisneros.