Dio la cara y lo hizo muy dignamente. Luis Fabiano no escondió que, según su punto de vista, y el de muchas más personas, está finalizando un ciclo en el Sevilla. Pero quiere terminarlo con las más altas miras posibles. Por ello, aun reconociendo lo que dijo a una web brasileña, solicitó con rabia mirar exclusivamente al presente, que no es ni más ni menos ese Oporto en el que él mismo tuvo un complicado pasado. Del futuro, ya habrá tiempo para hablar, según él mismo afirmó.

El paulista habló con franqueza del mal momento de su equipo: "El Sevilla no está haciendo la temporada que todos esperábamos, está siendo difícil, pero hay que responder a la presión y darlo todo en la Liga Europa. Todos sabemos lo que es, ya la ganamos dos veces, y sabemos cómo tenemos que jugarla. Si llegamos hasta el final y la ganamos nos salvaría la temporada", aseguró antes de tocar el tema candente, sus declaraciones a globoesporte.com: "Yo lo que tengo que aclarar no es aquí, sino con los compañeros, con el entrenador y con el club. Hablé una cosa en Brasil y aquí llega de otra manera. Con treinta años que tengo y seis que llevo aquí empiezo a pensar que mi ciclo está llegando al final, pero eso es pasado, sólo estoy pensando en el partido y no voy a hablar de este tema. Ya habrá tiempo para hablar más adelante".

Zanjado el espinoso asunto, se extendió sobre el partido. ¿Puede responder este Sevilla como aquel que se paseaba por Europa? "El momento que estamos viviendo es muy complicado, pero el Sevilla es el mismo. Tiene jugadores que ganaron las dos copas de la UEFA y hay que intentar volver a ser el Sevilla grande y ganador de los años pasados. Seguro que volveremos y lo que queda de temporada volveremos a ganar y lograremos los objetivos. Somos una piña, estamos muy tristes por lo que está pasando, pero tenemos que sacar fuerzas para volver a ganar como sea".

El paulista reconocía que la cita de hoy es trascendental, un gran partido europeo para disfrutar que puede marcar la temporada: "Es el partido más importante de la temporada. Yo creo que todos sabemos la importancia que tiene el partido, sabemos que no vivimos un buen momento, pero con una victoria se cambia todo. Hay que salir a por todas con el apoyo de nuestra afición e intentar ganar. Ganando las cosas vuelven a su normalidad. Con una victoria las cosas van a mejorar".

Tocaba hablar de su ex equipo, de donde llegó al Sevilla en 2005: "De mi época quedan pocos jugadores. El Oporto tiene experiencia en competiciones internacionales y está muy bien en su liga, pero el Sevilla es peligroso en su casa, es un adversario difícil, confíamos en nuestro trabajo. Aquí tenemos jugadores con experiencia, que ganaron muchas cosas. El Oporto es un poquito favorito por el momento que está viviendo, pero no vamos a tirar la toalla de antemano, porque el Sevilla puede ganar al Oporto sin problema ninguno". ¿Y qué recuerda de su etapa allí? "No pasé un buen momento, sobre todo fuera del terreno de juego, porque mi madre estuvo secuestrada dos meses en Brasil. También las lesiones me impidieron una buen secuencia. Pero tengo buenos recuerdos, la Copa Intercontinental, la amistad con Diego... Me sirvió como experiencia estar en un gran club como el Oporto", dijo, y advirtió: "Hulk es muy peligroso, jugué con él en la selección y hay que tener cuidado con él, pero el Oporto no es sólo Hulk".