El fin de semana pasado se conocía que Nikola Radicevic había sido expulsado de la concentración de la selección sub 19 serbia, que este viernes inicia el Mundial de la categoría en Praga.

Las informaciones en medios de su país apuntaban a un motivo de indisciplina como causa de su adiós, algo que sorprendió tanto en el Cajasol y a sus compañeros como su compatriota Bogdanovic, dado su comportamiento durante toda la temporada en Sevilla. "Se puede engañar un mes, pero no un año entero. Su actitud aquí fue siempre la mejor", explican en la entidad hispalense. El Cajasol se puso en contacto enseguida con el ex jugador Dejan Bodiroga, director técnico de la Federación de Serbia, para pedir una explicación más allá de la "indisciplina" de la que se hablaba en su país.

Al parecer, Radicevic arrastra unos problemas en la espalda con los que estaba jugando en los partidos de preparación, un fijo para el técnico Dejan Mijatovic con más de 30 minutos por encuentro. En un entrenamiento, se quedó en un bloqueo y se resintió de sus dolores, aunque el preparador balcánico no creía que esas molestias fueran ciertas y siguió exigiéndole el máximo durante la sesión de trabajo. Tras la misma, el base, junto a otro compañero, se reunió con Mijatovic para explicarle su dolencia y el resultado de ese encuentro fue su la exclusión de la selección.

El Cajasol defiende a su jugador y de la conversación con Bodiroga, "encantado con el jugador", desprenden en el club que roces en años anteriores han influido en esta drástica decisión que la Federación Serbia no ha hecho pública y a la que nunca se ha referido como problemas de indisciplina.