Cerrado el plazo de inscripción de jugadores en España y en la mayoría de las liga europeas, Diego Perotti mantiene viva la esperanza de salir del Sevilla y negocia con Boca Juniors para vestir la camiseta del equipo en el que jugó su padre. El extremo argentino y el club bonaerense están de acuerdo, según el entorno del jugador, pero eso de nada valdrá sin que el Sevilla dé vía libre a la operación y eso no está tan claro, pues uno de los problemas es su alta ficha y en Nervión saben que ni el jugador accederá a rebajarse su sueldo todo lo necesario ni Boca podrá acercarse a las cantidades que percibe el extremo. Otro asunto que impide el acuerdo es el tiempo restante del contrato con el Sevilla, un año y medio. El Sevilla, en el caso de acceder, sólo aceptaría un préstamo por media temporada, pero Boca quiere un año. El Sevilla no acepta eso porque supondría que Perotti pudiera firmar como agente libre a partir del 1 de enero de 2015.

El padre del jugador aseguró en varias emisoras argentinas que el acuerdo entre todas las partes puede llegar a buen puerto. "Diego tiene todo arreglado con Boca. Falta que el Sevilla lo deje venir por un año. Pero si dice que no, no hay nada que podamos hacer. Ni Boca ni Diego", explicó Hugo Perotti.

Pero, por otra parte, Diego Angelici, presidente de Boca, ve difícil la operación, aunque no la da por perdida. Para empezar, pese a que el padre de Perotti aseguró que "todo está arreglado" con el club xeneize, su máximo dirigente admite que aún hay diferencias y que el jugador deberá rebajar aún más su sueldo de lo que ya ha hecho.

"Vamos a ver si achicamos la diferencia con Diego Perotti en los números. Todos los días hablamos con el representante", explicó Angelini, que también negocia con otro futbolista, Federico Carrizo, de Rosario Central.